Los Royals de Kansas City y las Grandes Ligas reconocieron el martes, durante el partido ante los Reds de Cincinnati, el legado del puertorriqueño Johnny Ramos, quien ha estado ligado a la organización desde 1974 en distintas labores, sobre todo en la de ‘scout’ de talentos.

El reconocimiento ocurrió en el hogar de los Royals previo a comenzar la tercera entrada ante los Reds, ante la presencia de unos 17,838 fanáticos.

Previo a eso, la MLB le entregó a Ramos, por medio de los Royals, el Pase Vitalicio a juegos de las Mayores, en reconocimiento por su larga y exitosa carrera. Ramos firmó como pelotero en 1964 con la organización de los Red Sox de Boston.

El puertorriqueño estaba presente en el estadio en compañía de su hijo Quique y no anticipaba que los Royals le ‘tocarían por tercera base’, metafóricamente hablando.

“Fue tremendo. Me sentaron en la silla de la leyenda (Buck O’Neil) y salí en la pantalla del Kauffman Stadium, en la televisión, y todo el mundo felicitándome. Fue tremendo”, describió.

Ramos estaba presente en Kansas City para asistir originalmente a las reuniones antes del sorteo de peloteros de la organización de los Royals.

Para la ocasión, Ramos estaba sentado en la mencionada butaca llamada Buck O’Neil Seat. La silla está localizada en el primer nivel y es utilizada para reconocer el legado de figuras que han marcado la ciudad de Kansas City con sus contribuciones a la comunidad.

Ramos ha firmado para los Royals a 11 peloteros boricuas que han llegado a las Grandes Ligas, siendo su firma más conocida la de Carlos Beltrán, quien fue Novato del Año con los Royals en la temporada del 1999 para después convertirse en un estrella de los Mets de Nueva York, entre otros equipos.

La pantalla del estadio transmitió un video del reconocimiento que contenía imágenes de Ramos en el trabajo y con su familia, además de un resumé de sus contribuciones con los Royals.

“Ha representado por muchos años a Carolina, Puerto Rico. Johnny está celebrando 50 años con los Royals y con las ligas de Puerto Rico. Ha trabajado incansablemente para los Royals y con Puerto Rico, ayudando a las próximas generaciones. Johnny ha causado un gran impacto a lo largo de la organización de los Royals”, decía el mensaje.

Ramos relató a este diario que inició su carrera con los Royals cuando el entonces escucha cubano y residente en Puerto Rico, el fenecido Clemente ‘Sungo’ Carreras, se retiró.

“Cuando Sungo decidió no trabajar más, el escucha Art Lilly me conoció y me vio trabajando con Sungo y me ofreció el trabajo, y desde entonces estamos aquí”, dijo.

Además de escucha, Ramos también hizo funciones en la década del noventa como instructor de cuadro interior en las ligas menores de los Royals.

El reconocimiento en el parque de los Royals le siguió a otro homenaje que sus homólogos le hicieron en la instalación y durante las reuniones de escuchas.

Ramos recibió el Pase Vitalicio de Oro. Con el mismo, la MLB le reconoce a Ramos su larga y exitosa dedicación a las Grandes Ligas.

Además de Beltrán, el veterano escucha también firmó al activo relevista de los Yankees de Nueva York, Fernando Cruz, quien es una gran historia de superación, así como a una que ‘no mojaba pero empapaba’, el jugador de cuadro Ramón Martínez.

Ramos sigue activo como escucha. “Ha sido una gran satisfacción”, resumió.

“Aquí estaban todos los escuchas de la organización hablándome de todos esos peloteros que he firmado. Ha sido un reconocimiento tremendo”, apuntó.