El anuncio oficial con el nombramiento de Yadier Molina para dirigir a Puerto Rico en el Clásico Mundial de Béisbol lo tiene consciente que el conteo regresivo para confeccionar el equipo se intensificará ahora y que son muchas variables las que tendrá que considerar junto a la gerencia, incluyendo qué ocurrirá con jugadores que están ahora mismo fuera del béisbol de Grandes Ligas.

En ese sentido, ni Molina ni el gerente general nombrado en enero por la Federación de Béisbol de Puerto Rico, Carlos Beltrán, están descartando a los guardabosques Eddie Rosario y Nelson Velázquez, ni al tercera base Emmanuel Rivera, todos presentes en la pasada edición del evento celebrado en Miami y en el que los boricuas se eliminaron en segunda ronda.

Rosario, en su caso, recientemente quedó en libertad de liga menor con la organización de los Brewers de Milwaukee. En esta temporada solo ha jugado cinco partidos en las Mayores con dos equipos.

Rivera, mientras tanto, fue dejado libre por los Orioles de Baltimore, y Velázquez por los Royals de Kansas de City y está jugando en México.

“Obviamente, hay que sentarse. Carlos Beltrán y la Federación toman las decisiones; vamos a tomar las decisiones en conjunto, y esos nombres siempre van a estar en esas listas, en cuestión de que los vamos a tirar al medio. Todos esos chamacos pueden representar a Puerto Rico en cualquier momento. Confío mucho en ellos, pero hay que esperar, qué es lo que está pasando en estos últimos meses para poder tomar la decisión”, respondió Molina sobre ese particular.

Beltrán fue más específico y explicó por qué no se puede descartar a nadie.

“Tenemos que esperar también los permisos de las organizaciones. Porque si estás contando con un jugador y descartas a otros, y no recibe permiso ese jugador, pues te quedas sin este y sin el otro porque lo descartaste. Vamos a explorar todas las opciones que tengamos; primero vamos a ir tras esos jugadores que entendemos nos dan la oportunidad de tener flexibilidad, de formar un buen equipo y también de tener profundidad. Y una vez recibamos esos permisos, se nos va a hacer más fácil tomar decisiones”, dijo Beltrán.

Otra de las variables que Molina, Beltrán y compañía tendrán que considerar, es la posibilidad de que pueda integrarse talento de primer orden entre los peloteros de ascendencia puertorriqueña, como el jardinero Riley Greene, de los Tigers de Detroit, el primera base Christian Encarnación-Strand, de los Reds de Cincinnati, el también inicialista Jac Caglianone, de los Royals de Kansas City, e incluso el guardabosque George Springer, de los Blue Jays de Toronto y de quien Beltrán fue compañero como jugador en 2017 en los Astros de Houston.

“Pienso que van a existir muchas posibilidades de que ellos quieran participar en el Clásico. Honestamente, hay un proceso y un protocolo, que para hacer el acercamiento al jugador, tiene que ser a través de Major League Baseball (MLB). Nuestro rol ahora es hacer el roster de 50 jugadores. En ese roster me voy a asegurar que todo aquel que ha demostrado interés, o todo ese jugador que entendemos que puede representarnos, va a estar ahí”, aseguró Beltrán en un aparte con El Nuevo Día.

Para ediciones previas del Clásico Mundial, los países han tenido hasta finales del año anterior al certamen, alrededor de diciembre, para entregar a MLB ese listado de medio centenar de peloteros. Y de acuerdo al proceso, la lista luego se va reduciendo.

Al preguntársele a Molina sobre la característica que tendrá el equipo que le gustaría confeccionar, más que hablar de aspectos técnicos del juego o de fortalezas, mencionó un aspecto que no va a las estadísticas, refiriéndose al tipo de jugador que quiere en la plantilla.

“Pienso que el amor a Puerto Rico… que tengan la pasión que tienen un Francisco Lindor, un Kike Hernández, un Machete (Martín Maldonado) que van a estar ahí… un Javy Báez rompiéndose el pellejo por Puerto Rico. Necesitamos personas así, que vengan a dar lo mejor y representen la camisa como es. Yo creo que ya merecemos, que Puerto Rico merece uno (campeonato) y vamos a luchar para eso”.

Báez, un campocorto natural que este año con Detroit se está desempeñando de forma extraordinaria como guardabosque central, y que con Puerto Rico ha jugado la segunda base, fue alabado tanto por Molina como por Beltrán debido a su versatilidad, ya que ven cierta posibilidad de que pueda jugar varias posiciones en el próximo Clásico.

“Javy puede ayudarnos en cualquier lado. Todo depende de qué equipo tengamos. Si tenemos un Kike en el ‘center field’, me gustaría tener un Javy en segunda. Todo depende cómo el equipo se pueda hacer y el ‘matcheo’ (contra el rival). Pero Javy nos puede ayudar en cualquier lado, es un tremendo pelotero, y estamos muy contentos de que él se decida para jugar por nosotros”, señaló Molina.

“Me gusta”, contestó, por su lado, Beltrán cuando se le pregunto sobre la idea y la posibilidad de ver a Báez jugando en los bosques.

“Javy es un tipo versátil. Lo que ha hecho este año me encanta. Me gusta en los ‘outfields’ y también en segunda base. Recuerda que ha hecho un trabajo extraordinario como segunda base para nosotros. Eso nos da más flexibilidad”.

En el cuerpo de lanzadores, Puerto Rico deberá contar con el bayamonés José Berríos, al tiempo que Seth Lugo expresó públicamente su deseo de volver a vestir el uniforme nacional, tras ausentarse en la pasada edición.

Marcus Stroman, en tanto, debutó con los boricuas en 2023 y esta temporada no ha lanzado con los Yankees de Nueva York debido a una lesión.

Jorge López es otro de los jugadores que está en la misma situación de Rosario y Velázquez sin contrato actualmente en las Mayores, tras ser dejado en libertad por los Nationals de Washington. López debe ser un brazo a considerar ya que está saludable.

Mientras, los hermanos Edwin y Alexis Díaz también han confirmado que participarán en el torneo.

Puerto Rico albergará -desde el 6 de marzo- la primera ronda del Grupo A en el Estadio Hiram Bithorn con la presencia de Cuba, Canadá, Panamá y Colombia.