Washington— El Departamento de Trabajo de Estados Unidos ha disminuido dramáticamente la cantidad de datos sobre la inflación que recopila debido a la congelación de puestos de trabajo por parte del gobierno de Donald Trump.

La situaciín ha generado preocupación entre los economistas sobre la calidad de las cifras de inflación justo cuando se están observando de cerca por el impacto de los aranceles.

La Oficina de Estadísticas Laborales del departamento, que produce el índice mensual de precios al consumidor, la medida de inflación más observada, dijo el miércoles que está “reduciendo la muestra en áreas de todo el país” y dejó de recopilar datos de precios por completo en abril en Lincoln, Nebraska, y Provo, Utah. También dijo que dejó de recopilar datos este mes en Buffalo, Nueva York.

En un correo electrónico que la BLS envió a los economistas, visto por The Associated Press, la agencia dijo que “redujo temporalmente el número de puntos de venta y cotizaciones que intentó recopilar debido a la escasez de personal” en abril. La recopilación de datos reducida “se mantendrá vigente hasta que se levante la congelación de contrataciones”.

El presidente Trump congeló las contrataciones federales en su primer día en el cargo y extendió la congelación en abril hasta fines de julio, lo que sugiere que los futuros informes de inflación también implicarán una menor recopilación de datos.

Los recortes han intensificado las preocupaciones entre los economistas de que los recortes en el gasto gubernamental podrían degradar la capacidad del gobierno federal para recopilar datos económicos clave sobre el empleo, los precios y la economía en general. La BLS también dijo el mes pasado que ya no recopilará los precios al por mayor en aproximadamente 350 categorías para su Índice de Precios al Productor, una medida de los cambios de precios antes de que lleguen al consumidor.

Los recortes también se producen en un momento de mayor incertidumbre sobre la economía y el impacto de los aranceles radicales de Trump en la contratación, el crecimiento y la inflación.

“El PPI está recortando cientos de índices de producción, y el CPI ahora se está construyendo con menos datos”, dijo Omair Sharif, economista jefe de la firma consultora Inflation Insights, en un correo electrónico. “Eso solo es preocupante dado que nos dirigimos de lleno al impacto de los aranceles en los precios”.

A principios de este año, la administración de Trump disolvió varios comités asesores que trabajaban con la BLS y otras agencias estadísticas para ajustar su recopilación de datos.

La BLS dijo que los recortes “tienen un impacto mínimo” en los datos generales de inflación, pero “pueden aumentar la volatilidad” de los precios reportados de artículos específicos.

Alan Detmeister, economista de UBS, un banco de inversión, dijo que los recortes probablemente tuvieron poco impacto en las cifras de inflación de abril. Pero “si este tipo de recortes continúan, degradarán la confiabilidad y la eficacia de estas agencias estadísticas”, dijo.