Nueva York— Una ola de calor sin precedentes azotó el este de Estados Unidos por otro día el miércoles, incluso cuando se pronosticaba que los termómetros pronto caerían hasta 30 grados en las mismas áreas.

No se esperaba que el calor del día fuera tan intenso como el martes, cuando al menos 50 récords de calor se igualaron o rompieron y 21 lugares alcanzaron temperaturas de tres dígitos. Alrededor de 127 millones de estadounidenses permanecieron bajo avisos de calor del Servicio Nacional de Meterología (SNM), por debajo del día anterior. Las temperaturas abrasadoras hicieron que las empresas de servicios públicos se apresuraran a mantener el aire acondicionado y las luces encendidas en medio de una demanda masiva de energía.

“Todavía va a ser, creo, bastante malo en todo el Este”, dijo el meteorólogo Bob Oravec del Centro de Predicción Meteorológica el miércoles por la mañana. “Creo que hoy es probablemente el último día de potencial récord generalizado. Puede que no haga tanto calor como ayer por algunos grados. Pero aún así, se esperan altas temperaturas en los altos 90 grados Farenheit (°F) en una buena sección del Este”.

El SNM advirtió sobre “calor extremo” para un tramo del país desde Carolina del Norte hasta Nueva York y al oeste hasta Virginia Occidental. Las temperaturas máximas podrían acercarse a los tres dígitos desde Nueva York hasta Richmond.

Las temperaturas del miércoles por la mañana eran “un poco más cálidas de lo esperado” debido a los vientos del noroeste que traían “sobras cálidas de ayer”, dijo el ex científico jefe de la NOAA, Ryan Maue, un meteorólogo privado. Nantucket, Massachusetts, estaba por encima de los 90°F cuando su pronóstico máximo era de 82°F.

Se pronosticó que la cúpula de calor de alta presión que ha horneado el Este se rompería. Un frente frío comenzó a moverse hacia el sur desde Nueva Inglaterra, trayendo consigo nubes y temperaturas más frías, no solo más frías que 100°F, sino más frías de lo normal.

Esa masa de aire que se basa en las frías aguas oceánicas hará que las temperaturas se desplomen a finales de semana en Filadelfia, que alcanzó un récord de 101°F el martes, dijo Ray Martin, meteorólogo del SNM en Mount Holly, Nueva Jersey. Las temperaturas del aire estarán en los bajos bajos 70°F.

“Se sentirá como un shock para el sistema, pero no es nada particularmente inusual”, dijo Martin.

El pronóstico máximo de Boston para el viernes es 34°F más bajo de lo que alcanzó el martes.

“Se sentirá como una estación diferente”, dijo Oravec.

Sin embargo, no durará. Después de uno o dos días, se pronostican temperaturas ligeramente más cálidas de lo normal, pero no tan altas como las de principios de esta semana, dijo Oravec.

El latigazo meteorológico de un extremo a otro ocurre con más frecuencia a medida que el mundo se calienta en general por la quema de combustibles fósiles como el carbón, el petróleo y el gas natural, dijeron los científicos.

El martes fue probablemente el pico del calor, con Baltimore como el rey del sofoco. El máximo de la ciudad de 105°F rompió un récord anterior por cuatro grados. Por la noche, cuando el cuerpo humano necesita enfriarse, las temperaturas solo bajaron a 87°F.

Baltimore no estaba solo. Una docena de estaciones meteorológicas tenían 101°F o más, incluidos dos aeropuertos de Nueva York. Boston alcanzó los 102°F, rompiendo su antiguo récord por siete grados. Los 100°F de Augusta, Maine, también rompieron su antiguo récord por siete grados.

Todos los estados costeros desde Maine hasta Carolina del Sur alcanzaron los 100°F en algún lugar, con Georgia y Florida registrando 99°F el martes.

“En términos generales, las áreas del Atlántico medio... no tienen que prepararse para el calor extremo como lo hacen Arizona o Texas”, dijo el profesor de ingeniería energética de la Universidad de Texas, Michael Webber, en un correo electrónico. “Por lo tanto, el calor extremo es menos familiar y, por lo tanto, más desafiante operativamente para ellos... Y no han construido tantas plantas de energía nuevas”.

El calor extremo provocó que la carretera se doblara en dos lugares en una carretera interestatal en el norte de Nueva Jersey. Los funcionarios de transporte estatales dicen que el impacto en la carretera de concreto en el condado de Morris el martes por la tarde obligó a cerrar algunos carriles mientras se realizaban reparaciones temporales. Luego, las cuadrillas comenzaron a trabajar para reemplazar las áreas dañadas y repavimentar esas secciones.

Algunas calles del centro de Chicago se cerrarán el miércoles por la noche para reparar el pavimento que se ha doblado debido a las altas temperaturas en medio de una ola de calor en curso en la ciudad.

“Las fallas o reventones del pavimento ocurren cuando las altas temperaturas prolongadas hacen que la carretera se expanda y se doble o reviente, lo que resulta en superficies de conducción irregulares”, dijo el Departamento de Transporte de Illinois en un comunicado.

En Chesapeake, Virginia, un mal funcionamiento relacionado con el calor provocó que un puente permaneciera atascado en la posición abierta.