Washington— Un grupo liderado por Estados Unidos ha solicitado al gobierno del presidente Donald Trump que intervenga con un monto inicial de $30 millones para poder continuar con su muy escrutada y respaldada distribución de ayuda en la Franja de Gaza, según tres funcionarios de Estados Unidos y la solicitud de la organización para el dinero.

Esa solicitud, obtenida por The Associated Press, también ofrece algunos de los primeros detalles financieros sobre la Fundación Humanitaria de Gaza y su trabajo en el territorio. Esto incluye una proyección de un presupuesto mensual de $150 millones una vez que los sitios de ayuda actuales del grupo estén completamente operativos, una cantidad equivalente a $1,800 millones al año.

La fundación dice que ha proporcionado millones de comidas en el sur de Gaza desde finales de mayo a los palestinos, ya que el bloqueo y la campaña militar de Israel han llevado a Gaza al borde de la hambruna.

Pero el esfuerzo ha registrado tiroteos casi diarios que han causado la muerte de palestinos que intentaban llegar a los sitios de distribución. Los principales grupos humanitarios también acusan a la fundación de cooperar con los objetivos de Israel en la guerra de 20 meses contra Hamás de una manera que viola los principios humanitarios.

La solicitud de financiación del grupo fue presentada a la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid), según los funcionarios estadounidenses, quienes no estaban autorizados a discutir el asunto públicamente y hablaron bajo condición de anonimato.

La solicitud estaba siendo procesada esta semana como potencialmente uno de los últimos actos de la agencia antes de que el gobierno republicano absorba la Usaid en el Departamento de Estado como parte de profundos recortes en la asistencia extranjera.

Dos de los funcionarios dijeron que se les informó que el gobierno ha decidido otorgar el dinero. Señalaron que el procesamiento avanzaba con poca de la revisión y auditoría normalmente requeridas antes de que Washington otorgue subvenciones de asistencia extranjera a una organización.

En una carta presentada el jueves como parte de la solicitud, el secretario de la Fundación Humanitaria de Gaza, Loik Henderson, dijo que su organización “estaba agradecida por la oportunidad de asociarse con ustedes para sostener y escalar operaciones que salvan vidas en Gaza”.

Ni el Departamento de Estado ni Henderson respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios el sábado.

Israel dice que la fundación es la pieza clave de un nuevo sistema de ayuda para arrebatar el control a las Naciones Unidas, que Israel alega ha sido infiltrada por Hamás, y a otros grupos humanitarios. El uso de sitios fijos en el sur de Gaza por parte de la fundación está en línea con el plan del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu de usar la ayuda para concentrar a más de dos millones de personas del territorio en el sur, liberando a Israel para luchar contra Hamás en otros lugares.

Los trabajadores de ayuda temen que sea un paso hacia otro de los objetivos públicos de Netanyahu, remover a los palestinos de Gaza en migraciones ‘voluntarias’ que los grupos de ayuda y las organizaciones de derechos humanos dicen equivaldrían a salidas forzadas.

La ONU y muchos grupos sin fines de lucro acusan a la fundación de intervenir en la distribución de ayuda con poca transparencia o experiencia humanitaria y, crucialmente, sin un compromiso con los principios de neutralidad e independencia operativa en zonas de guerra.

Desde que la organización comenzó sus operaciones, varios cientos de palestinos han sido asesinados y cientos más han resultado heridos en tiroteos casi diarios mientras intentaban llegar a los sitios de ayuda, según el Ministerio de Salud de Gaza. Testigos dicen que las tropas israelíes disparan regularmente fuertes ráfagas hacia las multitudes en un intento de controlarlas.

El ejército israelí ha negado disparar contra civiles. Dice que realizó disparos de advertencia en varios casos y disparó directamente a algunos “sospechosos” que ignoraron las advertencias y se acercaron a sus fuerzas.

No está claro quién está financiando la nueva operación en Gaza. Ningún donante se ha presentado. El Departamento de Estado dijo la semana pasada que Estados Unidos no la está financiando.

En documentos que respaldan su solicitud, el grupo dijo que recibió casi $119 millones para operaciones de mayo de “otros donantes gubernamentales”, pero no da detalles. Espera $38 millones de esos donantes gubernamentales no especificados para junio, además de los $30 millones esperados de Estados Unidos.

La solicitud no muestra financiación de filantropía privada ni de ninguna otra fuente.