Viejo San Juan - Tras alcanzar un acuerdo con la Fiscalía federal, Danielle Bertothy, la turista estadounidense acusada de incendiar varios negocios en Cabo Rojo en la noche del 2 de enero, se declaró culpable este martes en el Tribunal federal.

“Culpable”, afirmó Bertothy, de 37 años, ante la jueza de distrito Gina Méndez Miró en la vista de cambio de alegato celebrada en la sala 5 del Tribunal para el Distrito de Puerto Rico en el Viejo San Juan.

La acusada, natural de Misouri, se declaró culpable por el cargo de provocar un incendio intencional que destruyó parte del edificio de un negocio, afectando así el comercio interestatal.

A consecuencia del incendio, la hospedería Luichy’s Seaside Hotel sufrió daños que su dueño, Ángel Luis Marrero Colón, estimó en más de $500,000. Otros tres locales contenidos en el hotel, el restaurante Marinera, el bar Marea Restaurant y Artesanías Juavia, también sufrieron daños.

Como parte del acuerdo, las partes recomendaron que Bertothy cumpla la sentencia mínima obligatoria de cinco años de prisión que estipula el cargo por el cual se declaró culpable.

La Fiscalía federal confirmó que alcanzó un acuerdo con los abogados de Bertothy en una moción radicada el 16 de julio.

“¿Entiende que la sentencia que imponga puede ser diferente a la recomendada en el acuerdo de culpabilidad? Esa sentencia aún no es definitiva, pues la Oficina de Probatoria (encargada de preparar el informe presentencia) examinará el caso y evaluará las guías de sentencia que considere apropiadas. ¿Entiende eso?“, preguntó Méndez Miró a Bertothy en la vista que comenzó a la 1:12 p.m.

“Sí, su señoría”, afirmó Bertothy, a la pregunta de Méndez Miró. En ocasiones, se notó que su voz sonaba temblorosa.

Durante la sesión, Méndez Miró, como le es requerido, verificó con Bertothy si discutió su decisión con su representación legal, si entendió las consecuencias de una admisión de culpabilidad, y si entendió que tuvo tiempo suficiente para evaluar sus opciones.

“¿Entiende que no habrá juicio? Estaría renunciando a su derecho a un juicio, renuncia a su derecho a contrainterrogar y renuncia a su derecho a no incriminarse”, enfatizó Méndez Miró al dirigirse a Bertothy.

“No podrá ocupar cargos públicos ni poseer armas de fuego, y podría perder su derecho al voto en su estado de residencia”, le recordó la jueza de distrito.

“Sí, lo entiendo”, reafirmó Bertothy.

La Fiscalía federal confirmó, en una moción radicada el 16 de julio, que ambas partes habían alcanzado un acuerdo en el caso por el que se acusaba a Bertothy.

Aunque será Méndez Miró quien determinará, basado en el informe presentencia, si multará a Bertothy, el crimen por el cual se declaró culpable, según explicó la Fiscalía federal en el documento del acuerdo, incluye una multa que no puede exceder de $250,000 y un periodo en probatoria hasta un máximo de tres años

La vista de sentencia fue señalada para el 20 de octubre, desde las 10:00 a.m. Durante la sesión, Bertothy tendrá la oportunidad de expresarse ante el tribunal.

A su salida del tribunal, Marrero Colón expresó sentirse tranquilo y confiado en que se logrará justicia.

“Fue un proceso muy estructurado (...) La jueza preguntó lo mismo en diferentes ángulos solo para confirmar que ella está en sus cabales”, expresó.

“(Me siento) muy complacido. Vamos a esperar de aquí a 90 días para saber cuánto es la sentencia”, señaló Marrero Colón.

El comerciante anticipó que durante la vista de sentencia ofrecerá una declaración ante Méndez Miró.

“Yo voy a escribir lo que siento y he pasado en ese particular. Yo voy a ser bien detallista porque entiendo que voy a cerrar un capítulo y entiendo que tengo que sacarme todo lo que tengo por dentro (...) tengo 90 días para sacarme todo lo que tengo en mi corazón y en mi mente”, respondió conmovido.

“Siento esa tranquilidad y ese bálsamo de que por fin estamos llegando a justicia. Al final (de la vista), ella (Bertothy) empezó a llorar. Las lágrimas de ella no son nada comparado con las lágrimas que nosotros derramamos”, enfatizó Marrero Colón.

“Lo importante es que mandamos un mensaje claro de que cuando vienen turistas a Puerto Rico, deben respetar”, reiteró el comerciante.

Tras la radicación del pliego acusatorio por un gran jurado federal, la Fiscalía señaló que Bertothy se exponía a una pena mínima obligatoria de cinco años de prisión hasta un máximo de 20 años.

Marrero Colón expresó, en entrevista previa, que prefería que Bertothy cumpliera la pena máxima, pero reconoció que se allanaría a la decisión de Méndez Miró.

El dueño de Luichy’s Seaside Hotel confirmó que sus abogados radicaron una demanda civil contra Bertothy.

Bertothy se declaró culpable de provocar el incendio que afectó los cuatro establecimientos ubicados en Cabo Rojo.

La Fiscalía federal alegó que la turista “maliciosamente dañó y destruyó, por medio de un incendio, un edificio y otros bienes muebles e inmuebles utilizados en el comercio interestatal y extranjero”.

Al declararse culpable, Bertothy aceptó que provocó el fuego en el edificio donde ubica el hotel, que tenía 15 habitaciones ocupadas al momento del incidente.

La investigación de la Uniformada encontró Bertothy protagonizó una confrontación con empleados del restaurante Mar Barea, por lo que los empleados llamaron a la Policía Municipal. Los agentes que llegaron a la escena escoltaron a Bertothy hasta el alquiler de corto plazo ubicado a corta distancia del hotel tras determinar que estaba bajo los efectos de bebidas embriagantes.

Los empleados del restaurante Bar Marea añadieron que posterior al cierre del local, la mujer “regresó, cuando nos fuimos, derramó un galón de gasolina en la parte de al frente y procedió a incendiar el lugar”.