Los negocios están expuestos a enfrentar situaciones que pueden interrumpir sus operaciones y afectar su continuidad. La pérdida de ingresos y aparición de gastos inesperados pueden ocurrir en cualquier momento. En Puerto Rico, hemos sido testigos de diversas emergencias, desde fuegos, explosiones por escapes de gas, robos, o por desastres naturales, como inundaciones, huracanes, temblores y hasta pandemia.