

En días recientes un grupo de doce personas privadas de libertad se graduó exitosamente del bachillerato de Estudios Generales de la Universidad de Puerto Rico. Este logro no tiene precedentes en nuestro país. En efecto, es el fruto académico más fecundo del Programa de Estudios Universitarios para Personas Confinadas, creado originalmente en la década de 1990 por el historiador, docente y sacerdote jesuita Fernando Picó, ya fallecido. En la actualidad, el programa lo custodia diligente y atentamente la profesora Edna Benítez, quien es parte integral de este éxito, ocurrido contra viento y marea. El referido esfuerzo universitario, en definitiva, reconoce la dignidad humana de las personas condenadas y contribuye a la creación de condiciones mínimas para su (re)habilitación.
Te invitamos a descargar cualquiera de estos navegadores para ver nuestras noticias: