Es necesario cambiar de una perspectiva punitiva a un acercamiento dirigido a la prevención y a la prestación de servicios accesibles y continuos, escribe Eduardo Lugo
Es necesario cambiar de una perspectiva punitiva a un acercamiento dirigido a la prevención y a la prestación de servicios accesibles y continuos, escribe Eduardo Lugo
Cualquier niño o joven que crece en una comunidad con altos niveles de pobreza, enfrenta a dificultades que van desde las escasas oportunidades de movilidad social, falta de vivienda segura y deserción escolar hasta las brechas en el acceso a servicios de salud física y mental, nutrición, atención y recreación. Estos son precisamente los factores de riesgo que aumentan las probabilidades de conducta delictiva juvenil.
Te invitamos a descargar cualquiera de estos navegadores para ver nuestras noticias: