Hace algún tiempo, me he planteado la necesidad de una reflexión en torno a los serios problemas que confronta la zona histórica de San Juan. No es una imposición a partir de un solo problema inmediato, sino el conjunto de dificultades de múltiple naturaleza que asedian este espacio urbano emblemático de nuestra puertorriqueñidad. Esta reflexión enlaza la celebración de dos conmemoraciones de gran valor para nuestra historia y cultura. Me refiero a la celebración del Centenario de Ricardo E. Alegría y la correspondiente al Quinto Centenario del establecimiento de este segundo poblado colonial en la parte norte de la isla grande. Me percato rápidamente de la estrecha relación entre ambos eventos centenarios, de una parte, entre la mayor figura defensora de nuestros derechos culturales y de nuestro patrimonio material y espiritual, de otra, el testimonio del desarrollo humano forjado por una comunidad colonial que orientó nuestra historia.
Te invitamos a descargar cualquiera de estos navegadores para ver nuestras noticias: