Washington D.C. - El presidente de la junta directiva del banco internacional puertorriqueño Nodus, Juan Francisco Ramírez, se declaró culpable el lunes, en una corte federal de Miami (Florida), de conspiración para cometer fraude electrónico, como parte de un plan por el cual defraudó en más de $13.6 millones a la entidad financiera que lideraba.

“El acusado abusó de su cargo como presidente de la junta directiva para desviar fraudulentamente fondos del banco que se le había encomendado dirigir, lo que resultó en el colapso del banco”, indicó el secretario adjunto interino del Departamento de Justicia a cargo de la División Penal, Matthew Galeotti.

Ramírez se enfrenta a una pena de cárcel de hasta 20 años. La vista de sentencia no ha sido programada.

Al declararse culpable, Ramírez accedió a que se le confiscaran $13.6 millones, que se considera eran sus ganancias por el fraude cometido.

De acuerdo con la fiscalía federal, Ramírez, de 60 años, conspiró, entre 2017 y 2023, con otras personas para desviar $11 millones en fondos de Nodus a una entidad financiera de Miami, con el propósito de que pudiera después dárselos en préstamos a él y un cómplice.

Ramírez y un cómplice ocultaron a otros miembros de la dirección de Nodus y a la Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras (OCIF) que esas inversiones eran para su beneficio, en violación de la ley puertorriqueña y las normas de su empresa sobre transacciones con información privilegiada.

Además, según la fiscalía federal, “entre enero de 2018 y septiembre de 2021, Ramírez y un cómplice indujeron fraudulentamente a la junta directiva y al contralor de Nodus a aceptar o facilitar la compra de, al menos, 47 pagarés por un total aproximado de $25.3 millones de una compañía financiera con sede en Miami, de la que Ramírez y su cómplice eran copropietarios”.

La OCIF informó a Nodus, en marzo de 2023, su intención de liquidar el banco, a lo que la empresa accedió.

Ante ese proceso, Ramírez y un cómplice obligaron a Nodus a comprar a su financiera de Miami una cartera de préstamos valorada en $26 millones, a pesar de que en su mayoría estaban morosos y no contaban con garantías.

La adquisición de la cartera de préstamos representaba el pago de la deuda de los 47 pagarés adquiridos por Ramírez, entre 2018 y 2021. 2021.