La Organización Mundial de Boxeo (OMB) despojó al estadounidense Sebastian Fundora de su campeonato mundial superwélter tras determinar que incumplió con su obligación de realizar una defensa obligatoria ante el puertorriqueño Xander Zayas, designado oficialmente como retador mandatorio de ese organismo desde el mes de marzo.

En una resolución emitida por el Comité de Campeonatos emitida este 1 de mayo y firmada por su presidente, Luis Batista Salas, la OMB declaró vacante el título de las 154 libras y canceló la subasta para dicha pelea que estaba pautada para el 2 de mayo. Además, el organismo anunció que evaluará de inmediato a los contendientes elegibles para disputar el cinturón.

La decisión surge luego de que Premier Boxing Champions (PBC), la promotora de Fundora, anunciara públicamente una revancha ante el australiano Tim Tszyu para el mes de julio, sin haber solicitado autorización a la OMB ni completar antes la defensa obligatoria ante Zayas. Esto, según la OMB, constituye una violación directa de sus reglamentos, que establecen que un campeón no puede realizar combates intermedios si tiene una defensa obligatoria pendiente.

Aunque los equipos del ahora exmonarca de la OMB y Zayas iniciaron negociaciones, y solicitaron una extensión conjunta para evitar una subasta, el organismo deportivo concluyó que Fundora violó el reglamento al pactar unilateralmente otra pelea sin justificación ni permiso oficial.

“La obligación de defender ante el retador obligatorio no puede ser ignorada ni sustituida por decisión del campeón o su equipo”, señala la resolución.

Con el título vacante, Zayas —quien ocupa el primer puesto en el ranking junior mediano de la OMB— apunta a pelear ante el número dos, el mexicano Jorge García Pérez.

Aunque la decisión es final y ejecutable de inmediato, Fundora y su equipo tienen un plazo de 14 días para apelar ante el Comité de Quejas y Apelaciones de la OMB.