Florida - Un hombre condenado por disparar mortalmente a un hombre y una mujer durante un robo con allanamiento de morada y más tarde confesar otros tres asesinatos está programado para ser ejecutado el jueves por la noche.

Frank Athen Walls, de 58 años, recibirá la inyección letal a partir de las 18.00 horas en la prisión estatal de Florida, cerca de Starke. Walls fue declarado culpable de dos cargos de asesinato, dos cargos de secuestro, allanamiento de morada y robo, y condenado a muerte en 1988. Posteriormente, el Tribunal Supremo de Florida revocó la condena y ordenó un nuevo juicio, y Walls volvió a ser declarado culpable y condenado a muerte en 1992.

Sería la decimonovena condena a muerte ejecutada en Florida en 2025, lo que ampliaría aún más el récord estatal de ejecuciones totales en un solo año.

Según los registros judiciales, Walls irrumpió en la casa móvil de Edward Alger, aviador de la base aérea de Eglin, y su novia, Ann Peterson, en julio de 1987. Walls ató a la pareja, pero Alger consiguió liberarse y atacar a Walls. Walls degolló a Alger y le disparó en la cabeza cuando el aviador siguió luchando. A continuación, Walls atacó a Peterson y le disparó mientras forcejeaba.

Walls fue detenido al día siguiente del hallazgo de los cadáveres, cuando su compañero de piso avisó a la policía del extraño comportamiento de Walls. Durante un registro de la vivienda, los investigadores informaron de que habían encontrado objetos de la escena del crimen, y Walls admitió posteriormente haber cometido los asesinatos.

Tras su condena, las pruebas de ADN vincularon a Walls con la violación y asesinato de una mujer, Audrey Gygi, en mayo de 1987. Walls se declaró inocente, evitando así otro juicio y una posible condena a muerte. Walls también admitió su responsabilidad en los asesinatos de Tommie Lou Whiddon, en marzo de 1985, y de Cynthia Sue Condra, en septiembre de 1986, como parte de un acuerdo con la fiscalía.

Los abogados de Walls presentaron recursos ante el tribunal estatal alegando que su discapacidad intelectual y otros problemas médicos deberían inhabilitarlo para la ejecución, pero el Tribunal Supremo de Florida falló en contra de Walls la semana pasada. Los recursos seguían pendientes ante el Tribunal Supremo de Estados Unidos.

Un total de 46 hombres han muerto por ejecución ordenada por un tribunal en lo que va de año en Estados Unidos, y está previsto que más de una docena de personas más sean ejecutadas en 2026.

Desde que el Tribunal Supremo de Estados Unidos restableció la pena de muerte en 1976, el mayor total anual previo de ejecuciones en Florida fue de ocho en 2014. Florida es el estado que más personas ha ejecutado este año, seguido de Alabama, Carolina del Sur y Texas, con cinco cada uno.

Todas las ejecuciones de Florida se llevan a cabo mediante inyección letal con un sedante, un paralizante y un fármaco que detiene el corazón, según el Departamento Correccional del estado.