Mineápolis — La exlíder de la Cámara de Minnesota, Melissa Hortman, será velada en el Capitolio de Minnesota el viernes, mientras que el hombre acusado de asesinarla a ella y a su esposo, y de herir a un senador estatal y a su esposa, comparecerá ante el tribunal.

Hortman, demócrata, será la primera mujer y una de las menos de 20 personas en Minnesota en recibir este honor. Será velada junto a su esposo, Mark, y su golden retriever, Gilbert. Su esposo también fue asesinado en el ataque del 14 de junio, y Gilbert resultó gravemente herido y tuvo que ser sacrificado.

El público podrá presentar sus respetos desde el mediodía hasta las 5 p.m. del viernes. House TV transmitirá la ceremonia en vivo. Un funeral privado está programado para las 10:30 a.m. del sábado. El servicio será transmitido en vivo en el canal de YouTube del Departamento de Seguridad Pública.

La ex vicepresidenta Kamala Harris volará a Minnesota para el funeral, pero no tendrá un papel oratorio, según su oficina personal. Harris expresó sus condolencias esta semana a los hijos adultos de Hortman, y habló con el gobernador Tim Walz, su compañero de fórmula en 2024, quien extendió una invitación en nombre de la familia Hortman, dijo su oficina.

El caso penal continúa. El hombre acusado de asesinar a los Hortman y de herir a otro legislador demócrata y a su esposa comparecerá ante el tribunal el viernes para enfrentar cargos por lo que el fiscal federal principal de Minnesota ha llamado ‘un asesinato político’. Vance Boelter, de 57 años, de Green Isle, se entregó cerca de su casa la noche del 15 de junio después de lo que las autoridades han llamado la búsqueda más grande en la historia de Minnesota.

Se espera que la audiencia, ante el juez magistrado Douglas Micko, aborde si Boelter debe permanecer bajo custodia sin fianza y afirme que existe una causa probable para proceder. No se espera que presente una declaración. Los fiscales deben asegurar una acusación del gran jurado antes de que sea procesado más tarde, que es cuando normalmente se presenta una declaración.

Según la denuncia federal, el video policial muestra a Boelter afuera de la casa de los Hortman y captura el sonido de disparos. Y dice que el video de seguridad muestra a Boelter acercándose a las puertas delanteras de las casas de otros dos legisladores vestido como oficial de policía.

Sus abogados se han negado a comentar sobre los cargos, que podrían conllevar la pena de muerte federal. El fiscal federal interino para Minnesota, Joseph Thompson, dijo la semana pasada que no se ha tomado ninguna decisión. Minnesota abolió su pena de muerte en 1911. El Centro de Información sobre la Pena de Muerte dice que no se ha procesado un caso de pena de muerte federal en Minnesota en la era moderna, hasta donde puede determinar.

Boelter también enfrenta cargos separados de asesinato e intento de asesinato en el tribunal estatal que podrían conllevar cadena perpetua sin libertad condicional, asumiendo que los fiscales del condado obtengan su propia acusación por asesinato en primer grado. Pero las autoridades federales tienen la intención de usar su poder para juzgar a Boelter primero.

Otras víctimas y presuntos objetivos. Las autoridades dicen que Boelter disparó e hirió al senador estatal demócrata John Hoffman y a su esposa, Yvette, en su casa en Champlin antes de disparar y matar a los Hortman en su casa en el suburbio norte de Mineápolis de Brooklyn Park, a pocas millas de distancia.

Los fiscales federales alegan que Boelter también se detuvo en las casas de otros dos legisladores demócratas. Los fiscales también dicen que enumeró a docenas de otros demócratas como posibles objetivos, incluidos funcionarios en otros estados. Amigos describieron a Boelter como un cristiano evangélico con puntos de vista políticamente conservadores. Pero los fiscales se han negado hasta ahora a especular sobre un motivo.

La esposa de Boelter se pronuncia. La esposa de Boelter, Jenny, emitió un comunicado a través de sus propios abogados el jueves diciendo que ella y sus hijos están ‘absolutamente conmocionados, desconsolados y completamente sorprendidos’, y expresando simpatía por las familias Hortman y Hoffman. Ella no está bajo custodia y no ha sido acusada.

‘Esta violencia no se alinea en absoluto con nuestras creencias como familia’, decía su declaración. ‘Es una traición a todo lo que consideramos verdadero como principios de nuestra fe cristiana. Estamos consternados y horrorizados por lo que ocurrió y nuestros corazones están increíblemente apesadumbrados por las víctimas de esta tragedia insondable’.

Una declaración jurada de un agente del FBI describió a los Boelter como ‘preparacionistas’, personas que se preparan para incidentes mayores o catastróficos. Los investigadores incautaron 48 armas de su casa, según documentos de la orden de registro.

Si bien la declaración jurada del agente del FBI decía que las fuerzas del orden detuvieron a la esposa de Boelter mientras viajaba con sus cuatro hijos al norte de las Ciudades Gemelas en Onamia el día de los tiroteos, ella dijo en su declaración que no fue detenida. Dijo que después de recibir una llamada de las autoridades, condujo de inmediato para reunirse con ellos en una gasolinera cercana y ha cooperado plenamente con los investigadores.

‘Agradecemos a las fuerzas del orden por aprehender a Vance y proteger a otros de más daños’, dijo.