Cayey - Milagros “Millie”Colón tiene 85 años y estuvo casada dos veces. José Cáceres Aristud tiene 80 años y tuvo cuatro matrimonios. Ambos, por distintas razones, terminaron siendo participantes del Centro de Actividades y Servicios Múltiples para Personas de Edad Avanzada del Municipio de San Juan (CASMPEA), que cuenta con nueve localidades diurnas.

Se conocieron en el centro del sector Buen Consejo, donde se enamoraron y se convirtieron, el uno para el otro, en una herramienta de apoyo emocional.

“Lo más que valoramos de este proceso es disfrutar, junto a compañeros de nuestra edad, de sentimientos y experiencias que no sabíamos que todavía podían existir”, manifestó, alegre, Cáceres Aristud a El Nuevo Día.

Sigfredo Pons Montana, quien tiene 78 años y está integrado al centro de Cupey Alto, no iba a la playa hace cinco años. “No entré al agua, pero me senté en la arena y disfruté mucho”, sostuvo, haciendo referencia a un pasadía en el balneario de El Escambrón que tuvo recientemente, como parte del Campamento de Verano del Adulto Mayor Sanjuanero 2025.

Sus anécdotas no son las únicas que resaltan en el cierre de esta iniciativa del Departamento para el Desarrollo Social Comunitario de San Juan, que le permitió a 325 adultos mayores de CASMPEA vivir en plenitud durante cinco días, y que culminó con éxito este pasado viernes con una actividad en la lechonera Los Pinos, en Guavate, Cayey.

“Hace mucho querían un chinchorreo y ellos, como todos nosotros, tienen el derecho de salir a comer, de ir a la playa, de pasarla bien, y por eso decidimos finalizar el campamento con una ruta panorámica en Guavate”, explicó la primera dama de San Juan, Maritere González.

Si bien la soledad y la situación de los adultos mayores en Puerto Rico genera preocupaciones legítimas, hay iniciativas que apuestan por mejorar su calidad de vida. La Experiencia de Verano del Adulto Mayor Sanjuanero surgió por primera vez el año pasado, como una petición que le hicieron los adultos mayores al alcalde de San Juan, Miguel Romero Lugo.

“Trabajamos esta iniciativa con mucho miedo por la cantidad de participantes que estábamos movilizando. Uno de los adultos mayores me dijo que había sido la mejor semana de su vida y, dos semanas después, falleció”, relató la directora de la entidad, Francine Sánchez Marcano, al destacar que, desde entonces, entendió que “nunca es tarde para vivir”.

El propósito principal de CASMPEA es devolverles a los adultos mayores, a través de nuevas experiencias, “todo lo que han aportado a la sociedad y a nuestro país con su conocimiento y cariño”, añadió, emotiva, Sánchez Marcano.

En el campamento, los integrantes participaron de actividades recreativas, como una feria con malabaristas y magos, un torneo de dominó y sesiones de bingo. También, tuvieron calipso en la playa, donde hubo sillas de ruedas especializadas, facilitadas por el Departamento de Recreación y Deportes, para que personas con diversidad funcional y limitaciones físicas pudieran acceder al balneario. En el itinerario, se les incluyó, además, talleres emocionales de soledad y salud mental.

“Esto ha sido una experiencia maravillosa, han sido actividades excelentes para nuestra salud y, lo más importante, para mantener nuestra mente ocupada”, apuntó Graciela Parela Rodríguez, de 83 años y quien bailó con su andador durante todo el evento.

Su amiga Gladys Pérez Jiménez, del centro del sector El Comandante, concuerda: “La atención con nosotros, las personas de edad avanzada, ha sido única”, dijo, al apuntar que el cariño de los organizadores es inmenso. “Yo tengo 81 años y me siento viva”, añadió.

Durante el transcurso del año, el Departamento para el Desarrollo Social Comunitario estructura múltiples actividades para los participantes de CASMPEA, como una noche bohemia, una noche de gala, un reconocimiento a mujeres de la población avanzada el 8 de marzo, montajes de obras, visitas a conciertos musicales y hasta graduaciones de cursos que se ofrecen en los centros.

Igualmente, preparan actividades que son para todos los adultos mayores del municipio, no solo los participantes de CASMPEA, como el junte navideño en diciembre, donde se reúnen hasta 2,000 adultos mayores.

Asimismo, cada centro tiene líderes recreativos que ayudan a los adultos mayores a trabajar su balance, habilidades de motor fino y motor grueso y la nutrición. Incluso, hay eventos que permiten a los familiares integrarse y participar.

“Es importante mantener una buena matrícula de los centros, porque ahí monitoreamos día a día nuestros adultos mayores y sabemos cuándo tienen citas, si asisten a sus tratamientos y quiénes son su sistema de apoyo”, explicó Sánchez Marcano.

El seguimiento le permite a la entidad reconocer si alguno de los participantes en sus centros necesitan servicios adicionales de enfermería, trabajo social o psicología y poder tratarlos de la mano de otros entes como, por ejemplo, la Clínica de Salud Mental del Municipio de San Juan.

De igual manera, la primera dama recalcó que es importante exhortar a la juventud al voluntariado para que se sientan animados y apoyen a los adultos mayores en su núcleo familiar y fuera de su hogar.

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Las personas interesadas en integrarse a CASMPEA pueden acceder a la página web del Departamento para el Desarrollo Social Comunitario o comunicarse al (787) 480-4244.