Más allá de un mercado de artículos de segunda mano, el Gran Bazar Navideño de la Casa Protegida Julia de Burgos es un espacio de encuentro para las personas que defienden o apoyan la lucha contra la violencia de género en Puerto Rico.

Ante la compleja situación para acceder a fondos que las organizaciones sin fines de lucro que abogan por los derechos humanos han experimentado este año, el tradicional evento cobra mayor relevancia, pues representa una herramienta que apuesta a la autosostenibilidad del primer albergue para sobrevivientes de la violencia machista en el archipiélago.

“Las organizaciones sin fines de lucro, particularmente las que dan servicio a las sobrevivientes de violencia de género y sus hijos e hijas, están enfrentando una situación muy complicada con una nueva política de restricción de servicios. Así es que una de las áreas que nosotras queremos desarrollar para poder continuar dando los servicios es la importancia de la recaudación de fondos no gubernamentales”, expresó la presidenta de la Junta de Directoras de Casa Julia, Marta Elsa Fernández.

El evento –donde las personas podrán hacer sus compras navideñas de manera sostenible– se celebrará del 5 al 7 de diciembre, en el centro comunal de la urbanización Summit Hills, en San Juan.

Las piezas disponibles van desde ropa y bisutería hasta artículos para el hogar y juguetes para la niñez. Igualmente, algunas de las exparticipantes de Casa Julia estarán presentes con sus emprendimientos.

“Al público que apoya a Casa Julia, esta es una gran oportunidad no solamente de cooperar con la institución, sino también de comprar buenos regalos para la Navidad y para su uso personal”, indicó, por su parte, la licenciada Josefina Pantoja Oquendo, quien coordina el bazar.

Destacó que muchas personas han donado piezas en excelentes condiciones y que, por el espacio limitado, irán sacando artículos adicionales, a medida que se habilite con las ventas. Por eso, entiende que las personas pueden asistir todos los días y encontrar artículos distintos que adquirir.

Para esta edición, la meta es superar lo recaudado en la pasada, es decir, más de $10,000. Lo recaudado se dirige al fondo de dineros no restrictos, o sea, para la operación administrativa de la organización, que no se contempla en muchas de las propuestas.

“Es un poco hacerles justicia social a las trabajadoras, porque son personas muy sacrificadas que dan un servicio esencial, que la restricción de fondos por parte de las propuestas que recibimos, del gobierno de Puerto Rico y de Estados Unidos, nos impide poderles dar mejores salarios y cosas básicas, como el bono de Navidad. Así que nos alegra mucho cuando podemos superar la meta que tuvimos el año anterior, porque significa que podemos también recompensarlas a ellas”, acentuó Pantoja Oquendo.

El itinerario del bazar incluye la presentación musical del grupo Atípica, durante la noche del viernes, cuando también habrá venta de alimentos. Mientras, de 10:30 a.m. a 12:30 p.m., habrá un taller de arteterapia para la niñez, a cargo de la arteterapeuta Urania Domínguez.