El magistrado federal Marshal D. Morgan ordenó que Johnnuel Rodríguez Márquez, imputado por el asesinato de una joven de 25 años durante un intento de carjacking en Santa Isabel, permanezca en prisión hasta su juicio.

Representado por el licenciado Edwin Mora, de la Oficina del Defensor Público, Rodríguez Márquez compareció este miércoles a la vista de detención en el Tribunal Federal en el Viejo San Juan.

La fiscal Jeanette Collazo solicitó que Rodríguez Márquez permanezca en prisión sin derecho a fianza.

Collazo planteó que es un riesgo a la seguridad de la comunidad, pues se trata de un crimen violento y Rodríguez Márquez admitió haber participado de robos de vehículos a mano armada y de haberle disparado a Natalia Aileen Santiago Rivera en un intento de robo de auto a mano armada el 5 de julio.

“Se pide la detención en este caso. Como se presenta en la denuncia, el acusado enfrenta cargos por ofensas violentas. Una de ellas resultó en una muerte”, sostuvo Collazo.

Agregó que, “sobre el peso de la evidencia, aceptó su participación en varios crímenes que comenzaron el 2 de julio y terminaron el 5 de julio”.

“Durante esos días cometió un carjacking, intentó otros dos y en el tercero terminó con una muerte desafortunada por disparo. El acusado aceptó que fue el que disparó a la víctima”, abundó.

Con relación al riesgo de fuga, Collazo destacó que Rodríguez Márquez ya se escapó una vez de las autoridades, cuando agentes del Negociado de la Policía lo intervinieron en Bayamón en posesión del vehículo que supuestamente robó durante un carjacking en Juncos y luego usó con otras personas para el crimen en Santa Isabel.

La semana pasada, el jefe de la Fiscalía federal en Puerto Rico, William Stephen Muldrow, indicó que se expone a la pena capital, pero no detalló si será solicitada, ya que le corresponde al Departamento de Justicia en Washington tomar esa decisión.

“No hay combinación de medidas que puedan garantizar la seguridad de la comunidad y su comparecencia a los procedimientos en el tribunal”, apuntó la fiscal Collazo, durante la vista

Por su parte, Mora informó al tribunal que por el momento no solicitarán libertad bajo fianza, pero que se reservaba el derecho a pedirla más adelante.

Mora también informó al magistrado que su cliente renunciaba a la vista preliminar, mientras que solicitó al tribunal que ordene una evaluación sicológica de su representado.

Ante ese escenario, Morgan determinó que había causa probable para el procesamiento de Rodríguez Márquez y refirió el caso a un Gran Jurado federal para que emita los cargos formales.

Al momento enfrenta denuncias mediante una querella por carjacking, blandear un arma de fuego durante un delito violento y un intento de carjacking que resultó en una muerte.

En relación a este caso, el Negociado Federal de Investigaciones (FBI) arrestó este martes a Javier Santos Alejandro, quien supuestamente también confesó haber participado en los mencionados crímenes. Su vista de fianza está pautada para el 21 de julio.

Según señala la querella sometida por la Fiscalía federal, las imágenes de la cámara corporal del agente que intervino con el individuo que se dio a la huida en Bayamón, lograron identificarlo como Johnnuel Rodríguez Márquez.

Rodríguez Márquez fue detenido en la madrugada del jueves pasado en Las Piedras junto con otras dos personas, un hombre y una mujer, por presunta posesión de un vehículo hurtado.

Poco después, la custodia del hombre pasó a manos del FBI.

“Durante la entrevista al sospechoso, este admitió ser responsable del carjacking del 2 de julio del Nissan Versa color blanco. El sujeto indicó a los agentes que se acercó al conductor del vehículo y, a punta de pistola, le arrebató las llaves”, indica el documento oficial.

“El sospechoso también admitió que, luego del carjacking fallido en Juana Díaz, él y otros dos individuos se trasladaron hasta Santa Isabel para cometer otro robo de auto a mano armada. Rodríguez Márquez admitió a las autoridades que bajó del Nissan Versa blanco en la gasolina Shell, localizada entre las carreteras PR-510 y PR-584, en Juana Díaz, se acercó a lado del conductor, toco el cristal y le disparó a la mujer”, añade.

Los investigadores sospechan que al menos otras tres personas participaron del carjacking en el que falleció Santiago Rivera.

De acuerdo con la investigación, el vehículo utilizado por los sospechosos fue un Nissan Versa blanco del 2010 que fue reportado como robado mediante carjacking el 2 de julio en la gasolinera Sunoco ubicada en la carretera PR-198, en Juncos.

Dos días después del asesinato, el 7 de julio, el auto fue ocupado en Bayamón. La Policía fue alertada sobre el Nissan Versa hurtado. Durante una ronda preventiva, agentes en una patrulla observaron un vehículo con la descripción del auto en la carretera PR-829, del sector Los Nieves.

El auto estaba detenido con el bonete abierto. Al verificar la tablilla, confirmaron de que figuraba como hurtado.

Cuando los agentes se acercaron al hombre que estaba frente al vehículo, el sujeto salió corriendo hacia un monte. Luego, entró a una zona boscosa, donde perdieron su rastro. El FBI ocupó el vehículo.

“El sospechoso también admitió que, al momento de ser intervenido, el auto se había quedado sin gasolina y, mientras intentaba echarlo a andar, agentes uniformados se le acercó, mientras que él se dio a la huida. El hombre se internó en la maleza y estuvo escondido en los árboles hasta aproximadamente las 10:00 p.m.”, señala la querella

La semana pasada pasada, confidencias de un posible sospechoso llevaron a agentes de la Policía a Naguabo, y luego, a Las Piedras.

Durante una entrevista, un agente del distrito de Caguas a cargo de la pesquisa del carjacking en Juncos observó, en el interior de un Nissan Sentra blanco, al joven que ya era buscado como persona de interés.

Tras una persecución que culminó en la urbanización Jardines del Oriente en Las Piedras, el agente detuvo a Rodríguez Márquez, al igual que a una mujer y a un hombre que también viajaban en el vehículo.