Víctor García San Inocencio dice que Texas, robada a los mejicanos, hecha tierra de esclavos, indígenas y mejicanos perseguidos por 175 años, y hogar de 230,000 boricuas, sufre su urbanismo desmedido y su relación dilapidadora con la naturaleza
Víctor García San Inocencio dice que Texas, robada a los mejicanos, hecha tierra de esclavos, indígenas y mejicanos perseguidos por 175 años, y hogar de 230,000 boricuas, sufre su urbanismo desmedido y su relación dilapidadora con la naturaleza
El rostro crudo de la inequidad de la Meca del neoliberalismo ha quedado expuesto una vez más, en esta ocasión, en el estado de Texas. La formidable concentración de riqueza en hidrocarburos poco ha servido para evitar que, luego de una década, colapsara nuevamente su sistema eléctrico durante una nevada parida por el clima extremo que provoca el calentamiento global.
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