Días antes de que 10 hombres se escaparan de una cárcel de Nueva Orleans, funcionarios de la oficina del alguacil solicitaron dinero para reparar candados y puertas de celdas defectuosas que se consideraron un factor clave en la fuga.

Mientras la búsqueda de los siete fugitivos restantes se extiende a una nueva semana, los funcionarios continúan investigando quién o qué fue el culpable de una fuga que incluso los escapados calificaron de “fácil” — en un mensaje garabateado en una pared sobre el estrecho agujero por el que se escurrieron.

La alguacil del condado de Orleans, Susan Hutson, dijo que durante mucho tiempo ha expresado su preocupación por las “deficiencias” continuas de la cárcel, y agregó que la fuga “una vez más ha puesto de manifiesto la necesidad crítica de reparaciones y mejoras” a la infraestructura deteriorada.

Las imágenes de video de vigilancia mostraron que los hombres abrieron de golpe una puerta de celda, se deslizaron por un agujero detrás de un inodoro, escalaron una cerca de alambre de púas y huyeron de la cárcel a primera hora del viernes.

Cuatro días antes, Jeworski “Jay” Mallet — el jefe de correcciones del Centro de Justicia de Orleans — presentó la necesidad de un nuevo sistema de cerraduras durante la audiencia del Plan de Mejora de Capital de la ciudad.

Mallet dijo que el sistema actual en la cárcel, que alberga a unas 1,400 personas, fue construido para un “tipo de recluso de custodia mínima”.

Pero clasificó a muchos en la cárcel como reclusos de “alta seguridad” que esperan juicios por delitos violentos, incluidos cargos como asesinato, agresión y violación. Dijo que muchos requieren un “entorno de vivienda restrictivo que no existía” en la cárcel y, como resultado, la oficina del alguacil ha trasladado a docenas de personas bajo custodia a lugares más seguros.

Mallet continuó diciendo que algunas de las puertas y cerraduras de las unidades de celdas han sido “manipuladas” hasta el punto de que no solo no son seguras, sino que algunas ni siquiera se pueden cerrar correctamente.

Hutson dijo que los hombres “tiraron” de una puerta de celda cerrada con llave “para sacarla de sus rieles”. Luego se escurrieron por un agujero detrás de un inodoro, salieron por una puerta de carga antes de escalar una cerca de alambre de púas usando mantas y corriendo por una interestatal cercana en la oscuridad de la madrugada.

“Estas son las celdas que seguimos diciendo que necesitamos reemplazar a un gran costo en esta instalación”, dijo Hutson.

Desde que se convirtió en alguacil en 2022, Hutson dijo que se ha quejado de las cerraduras en todo momento y ha abogado por fondos adicionales para hacer que la instalación sea más segura.

“Le escribí una carta al juez del decreto de consentimiento, al consejo municipal y a todos los demás que quisieran escuchar, y cada vez que voy al presupuesto, digo lo mismo”, dijo Hutson.

La alcaldesa de Nueva Orleans, LaToya Cantrell, dijo durante una conferencia de prensa el domingo que la financiación para la cárcel ha sido “una prioridad” y que se han asignado fondos a la oficina del alguacil para gastos operativos y mejoras de capital. Bianka Brown, la directora financiera de la oficina del alguacil, dijo que el presupuesto actual “no admite lo que necesitamos” para garantizar las reparaciones y mejoras críticas.

“Se están privando las cosas”, dijo Brown sobre la cárcel, que durante más de una década ha estado sujeta a la supervisión federal y un decreto de consentimiento destinado a mejorar las condiciones. La cárcel, que abrió en 2015, reemplazó a otra instalación que tenía su propia historia de fugas y violencia.

Si bien Hutson dijo que las cerraduras jugaron un papel clave en la fuga, hay otros elementos cruciales que los funcionarios han descrito; Indicaciones de que la fuga pudo haber sido un trabajo interno, con tres empleados del alguacil ahora suspendidos; el agujero que los funcionarios dijeron que pudo haberse formado usando herramientas eléctricas; la falta de monitoreo del módulo de celdas, ya que el empleado encargado de la tarea había salido a buscar comida; y la policía no se dio cuenta de la fuga hasta un conteo de la mañana siete horas después de que los hombres huyeran.

Otros han señalado a Hutson como la culpable. La representante estatal Aimee Adatto Freeman, quien representa gran parte del Uptown de Nueva Orleans, pidió la renuncia del alguacil el lunes.

“En lugar de asumir la responsabilidad, ha señalado con el dedo a otros”, escribió Freeman en un comunicado. “Culpar a la financiación es una desviación, no una excusa”.

El gobernador de Luisiana, Jeff Landry, anunció recientemente que el estado está iniciando una investigación para determinar quién es responsable de la fuga. También ordenó al Departamento de Correcciones del estado que realice una auditoría del cumplimiento de la cárcel con los estándares correccionales básicos.

“Ahora no hay excusa para la fuga de estos delincuentes violentos”, dijo Landry, un republicano de línea dura en materia de delincuencia.

El gobernador también solicitó un inventario de los detenidos en espera de juicio o de aquellos que esperan sentencia en casos violentos en la instalación, para considerar trasladarlos a custodia estatal.

Tres de los siete reclusos que aún estaban en libertad el lunes por la noche fueron declarados culpables o enfrentan cargos de asesinato en segundo grado, dijeron las autoridades.