Trenton — Una tormenta invernal avanzaba el domingo por la costa este, y Nueva Jersey declaró el estado de emergencia y algunos aeropuertos anunciaron demoras y cancelaciones ante las posibles inundaciones costeras y los fuertes vientos, mientras que otro sistema de tormentas azotaba más al sur con fuertes lluvias e inundaciones.

“Los mayores efectos serán el potencial de inundaciones costeras, especialmente para las áreas desde el noreste de Carolina del Norte hacia el norte hasta gran parte de la costa de Nueva Jersey”, dijo el meteorólogo Bob Oravec, del Servicio Meteorológico Nacional en College Park, Maryland.

También se pronosticaron fuertes lluvias para el sureste de Nueva Inglaterra, el área de Nueva York y algunas han caído en las secciones costeras de Carolina del Sur, dijo Oravec.

En Outer Banks, en Carolina del Norte, un área que ha sufrido importantes daños por tormentas esta temporada, el agua del océano comenzaba a cruzar la autopista 12 en un motel cerca de Buxton, publicó el domingo en internet la Oficina del Sheriff del condado de Dare. La oficina instó a los viajeros a ser cautelosos y puso en alerta a los propietarios ante la proximidad de la marea alta.

Todo Nueva Jersey se encuentra en estado de emergencia desde el sábado por la noche. Se espera que dure hasta el lunes, autorizando la activación del personal de los servicios de emergencia del estado según sea necesario.

Se pronostica que partes del estado experimentarán inundaciones costeras de moderadas a mayores, inundaciones repentinas en el interior, vientos de hasta 97 km/h, hasta 13 centímetros de lluvia y fuerte oleaje, lo que podría causar erosión en las playas. Algunos voluntarios estaban colocando sacos de arena en las playas.

El Servicio Meteorológico Nacional colocó a la ciudad de Nueva York, Long Island y el sur del condado de Westchester bajo una advertencia de inundación costera y un aviso de viento hasta al menos el lunes por la tarde. Las áreas costeras de los suburbios de Long Island podrían sufrir inundaciones, con hasta 8 centímetros de lluvia y fuertes vientos, según el servicio meteorológico.

El domingo por la mañana ya se registraban ráfagas de viento de más de 48 km/h en la región.

Las empresas de servicios públicos de la zona han añadido más de 1,600 trabajadores para responder a la tormenta.

“Con las advertencias de fuertes vientos y los riesgos de inundaciones, mantenerse alerta, vigilante y tomar medidas para prepararse es crucial para la seguridad de todos”, dijo la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, en un comunicado.

Se anunciaron algunas demoras y cancelaciones de vuelos en los aeropuertos desde Washington, D.C. hasta Boston.

Se esperaba que la tormenta se alejara el lunes por la noche.