Nueva York - Zohran Mamdani no perdió tiempo como alcalde electo de Nueva York antes de dejar claro que ve parte de su nuevo rol como enfrentarse al presidente de Estados Unidos, quien había amenazado no solo con quitarle fondos a la ciudad si ganaba, sino también con arrestarlo y deportarlo.

Mamdani, un demócrata, se dirigió al presidente republicano directamente y extensamente desde el escenario en su fiesta de la victoria en Brooklyn el martes por la noche.

“Donald Trump, ya que sé que estás mirando, tengo cuatro palabras para ti: Sube el volumen”, dijo, antes de declarar: “Si alguien puede mostrarle a una nación traicionada por Donald Trump cómo derrotarlo, es la ciudad que lo vio nacer”.

Mamdani, quien nació en Uganda y se convirtió en ciudadano estadounidense naturalizado después de graduarse de la universidad, se presentó como la encarnación de la resistencia.

“Nueva York seguirá siendo una ciudad de inmigrantes, una ciudad construida por inmigrantes, impulsada por inmigrantes y, a partir de esta noche, liderada por un inmigrante”, dijo. “Así que escúchame, Presidente Donald Trump, cuando digo esto: Para llegar a cualquiera de nosotros, tendrán que pasar por todos nosotros”.

Donald Trump, quien ha pasado meses insultando a Mamdani y advirtiendo que la ciudad se arruinaría si ganaba, parecía estar mirando.

“..¡Y ASÍ COMIENZA!“, publicó en las redes sociales mientras Mamdani hablaba.

Mamdani, un socialista democrático que hizo campaña con una serie de políticas progresistas de extrema izquierda y un optimismo alegre que contrasta fuertemente con las tácticas más oscuras y de línea dura de Donald Trump, se espera que continúe enfrentando los persistentes ataques políticos del presidente, junto con un gobierno federal que puede intentar frustrar su agenda.

Nueva York se ha mantenido relativamente ilesa por la administración de Donald Trump, ya que ha apuntado a ciudades como Los Ángeles y Washington, enviando a la Guardia Nacional. El actual alcalde, Eric Adams, disfrutó de una alianza inusual con el presidente republicano, cuya administración retiró un caso federal de corrupción contra el alcalde para que pudiera ayudar mejor con la agenda de inmigración del presidente.

Donald Trump ha amenazado con recortar la financiación federal a la ciudad y montar una toma de posesión total, amenazas que se convirtieron en una piedra angular de las campañas de los rivales de Mamdani contra él.

“Será el ‘Alcalde Donald Trump’ si Mamdani gana”, dijo el ex gobernador Andrew Cuomo durante su último debate, advirtiendo que Mamdani era demasiado inexperto y un objetivo demasiado grande para negociar eficazmente con el presidente.

A medida que Mamdani ascendió de oscuro legislador estatal a estrella demócrata, Donald Trump y otros en su partido se apoderaron alegremente de sus propuestas políticas más controvertidas y declaraciones pasadas, tratando de presentar a Mamdani como el rostro de un nuevo Partido Demócrata que está fuera de sintonía con los estadounidenses comunes.

“El Partido Demócrata se ha rendido al socialista radical Zohran Mamdani y a la turba de extrema izquierda que ahora dirige el espectáculo”, dijo el portavoz del Comité Congresional Nacional Republicano, Mike Marinella, en un comunicado el martes por la noche. “Han adoptado con orgullo la eliminación de fondos para la policía, la abolición de ICE, el gravar a los estadounidenses trabajadores hasta la muerte y el reemplazo del sentido común con el caos. Cada demócrata de la Cámara es tontamente cómplice del colapso de su partido, y los votantes los harán pagar en 2026″.

Hace casi una década, Donald Trump era el candidato audaz pero no probado que logró una notable victoria política propia después de construir una coalición populista, aprovechar las redes sociales, comandar el centro de atención de los medios y prometer una ola de cambio.

Esas mismas cualidades que impulsaron al republicano a la Casa Blanca en 2016 han ayudado a Mamdani a ascender para convertirse en el próximo alcalde de la ciudad natal de Donald Trump y la ciudad más grande de la nación.

Pero en lugar de ver a Mamdani como un análogo demócrata para su propio camino hacia el poder, Donald Trump lo ha presentado como un primer oponente y una razón por la que puede buscar castigar o dominar a la ciudad.

Ambos parecen estar listos para ello.

Aunque la mayoría de los presidentes no dedican tiempo a enredarse con funcionarios locales electos, Donald Trump no es la mayoría de los presidentes, y la ciudad de Nueva York tiene un significado especial para él.

La ex estrella de reality shows nacida en Queens se hizo famosa en Manhattan, donde se convirtió en una estrella de televisión desde su ático dorado y luego lanzó su improbable campaña presidencial después de descender por su escalera dorada.

Donald Trump ha mantenido un enfoque particular en la ciudad, tratando de bloquear su programa de precios de congestión, tratando de cancelar la construcción de nuevos túneles debajo del río Hudson e insistiendo durante su campaña presidencial de regreso el año pasado en celebrar un mitin masivo en el Madison Square Garden a pesar de su impopularidad en la ciudad.

Mientras la ciudad se preparaba para elegir a su próximo alcalde, Donald Trump se involucró inusualmente. Falsamente etiquetó a Mamdani como comunista y amenazó con retirar fondos federales de la ciudad, o incluso tomar el control de ella, si Mamdani era elegido.

Y en el otoño, los intermediarios de la administración de Donald Trump se acercaron a Adams para tratar de persuadirlo de que abandonara su campaña de reelección en un intento de bloquear el camino de Mamdani hacia la victoria.

En la víspera de la elección, Donald Trump dijo que probablemente recortaría la financiación federal de la ciudad si Mamdani ganaba, escribiendo en las redes sociales que ‘es muy poco probable que contribuya con fondos federales, aparte del mínimo requerido’.

La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, se negó el martes a aclarar qué fondos Donald Trump podría buscar retener.

Pero ya había tratado de castigar a la ciudad este año como parte de un patrón más amplio de afirmación de poder contra los funcionarios demócratas electos que lo han criticado, incluyendo la suspensión de la financiación de algunos proyectos de infraestructura durante el cierre del gobierno y el intento de recortar las subvenciones destinadas a abordar los costos de los migrantes.

Las amenazas también resonaron en algunos votantes.

Amy Snyder, una asesora de arte que votó por Cuomo, dijo que temía que Mamdani “no pudiera enfrentarse a Donald Trump”.

Ariel Kohane, un republicano registrado que votó por Cuomo pero ha votado por Donald Trump varias veces, dijo que esperaba que el presidente hiciera todo lo que estuviera en su poder para evitar que Mamdani lograra su agenda, y esperaba que funcionara.

“Donald Trump probablemente tendrá que enviar a la Guardia Nacional y a los agentes de ICE también”, dijo Kohane.

Wacef Chowdhury, un voluntario de la campaña de Mamdani, dijo que anticipaba completamente que Donald Trump intentaría castigar a la ciudad en represalia por la victoria del socialista democrático.

“Sabemos que lo va a intentar, pero estamos listos”, dijo Chowdhury, quien trabaja en finanzas. “Luchamos contra el establishment, y vamos a hacer lo mismo con el presidente”.