Con el vicepresidente JD Vance llamando a Charlie Kirk un mártir por el cristianismo y un cardenal católico llamándolo un San Pablo de los tiempos modernos, algunos admiradores de Kirk sugieren que su asesinato galvanizará a multitudes de personas, especialmente jóvenes conservadores, para que se involucren más en las iglesias evangélicas y católicas.

Las evocaciones del fervor religioso inspirado por Kirk surgieron casi inmediatamente después de su muerte el 10 de septiembre y continuaron creciendo a medida que gran parte del servicio conmemorativo del domingo para el activista conservador se parecía a un servicio masivo de megaiglesia. Ha habido informes generalizados de un aumento en la asistencia a algunas iglesias evangélicas.

“Charlie tenía grandes planes, pero Dios tenía planes aún mayores”, dijo el secretario de Defensa, Pete Hegseth, en el servicio en Arizona. “Charlie comenzó un movimiento político, pero desató un renacimiento espiritual”.

El reverendo Robert Jeffress, un aliado desde hace mucho tiempo del presidente Donald Trump que dirige una megaiglesia bautista del sur en Dallas, dijo por correo electrónico: “El impacto a corto plazo del asesinato de Kirk es asombroso”.

“El derramamiento de emoción rivaliza con el del 11 de septiembre y el asesinato del presidente John Kennedy”, agregó Jeffress. “Aún está por determinarse si esta emoción genuina se traduce en un cambio a largo plazo, pero rezo para que así sea”.

Un aumento sostenido iría en contra de las tendencias. El politólogo Ryan Burge, de la Universidad de Washington en San Luis, un investigador líder en tendencias religiosas y pastor, dijo que la historia reciente no muestra ejemplos de un renacimiento religioso duradero después de un trauma cívico.

La asistencia solo aumentó brevemente después de los ataques del 11 de septiembre antes de volver a los niveles típicos, y ni la pandemia ni sus secuelas vieron ningún aumento a largo plazo en su conjunto.

“Para que haya un impacto notable en la asistencia a la iglesia, esto requeriría un cambio masivo en el comportamiento de millones de estadounidenses”, dijo Burge. “En un país de 340 millones de personas, incluso un aumento del 5% significaría que 17 millones más de personas irían a la iglesia semanalmente”.

Incluso si ocurriera un repunte a largo plazo, “necesitaríamos al menos 18 meses de datos para demostrar un efecto duradero”, dijo Burge.

Algunas personas e iglesias pueden experimentar avivamientos espirituales, pero “el plural de anécdota no son datos”, agregó.

Ya sea un breve repunte o no, las congregaciones cristianas conservadoras dicen que están viendo nuevas caras entre sus filas.

Gina Gleason, directora del equipo de participación política en Calvary Chapel Chino Hills, dijo que ya está viendo a más personas regresar a la iglesia tras la muerte de Kirk y espera que la ola de participación crezca.

El pastor de la megaiglesia del sur de California, Jack Hibbs, era amigo de Kirk y un conocido partidario de Trump. Kirk ha hablado en Calvary Chapel al menos 10 veces y cada vez, miles asistieron, llenando el santuario así como las salas de desbordamiento, dijo Gleason.

“Creo que vamos a ver un aumento particularmente en la participación juvenil porque escucharon a Charlie”, dijo Gleason. “Habló sobre política y temas, pero en el corazón de su mensaje estaba el Evangelio, la verdad sobre la salvación eterna en Jesucristo”.

Mark Francey, pastor principal de Oceans Church, una congregación de 4,500 miembros con sede en Irvine, California, dijo que la muerte de Kirk está teniendo un efecto tipo 11 de septiembre. Dijo que su congregación vio aumentos de asistencia de hasta el 30% el fin de semana después del asesinato.

“Después de tal trauma o tragedia, las personas que normalmente no oran comienzan a orar”, dijo. “La muerte despierta a las personas a lo que es realmente importante sobre la vida y los funerales nos recuerdan a todos nuestra propia mortalidad”.

La posibilidad de un avivamiento se transmitió en un montaje ampliamente difundido que apareció en “The Charlie Kirk Show” el 17 de septiembre, mostrando a varios usuarios de TikTok diciendo que fueron a la iglesia por primera vez en años después del asesinato.

En él, un hombre dijo que compró un traje para ir a la iglesia e intentará ser un mejor padre, esposo y líder para su familia. Una mujer dice que ella y su esposo regresaron a la iglesia después de 20 años y quieren que sus tres hijos crezcan tan fuertes en sus convicciones como lo fue Charlie Kirk.

Ese fue el mensaje enfatizado por Andrew Kolvet, productor ejecutivo de “The Charlie Kirk Show”, en una entrevista con Fox News después de la muerte de Kirk.

“Si quieres honrar a Charlie... vuelve a la iglesia. Abre tu Biblia; ora. Pídele a Dios que te guíe. Eso es lo que él quería”, dijo Kolvet.

El fundador de Communio, un ministerio de evangelización que trabaja con casi 400 iglesias de Estados Unidos en programas matrimoniales, dijo que había recibido informes de un aumento en la asistencia al culto en servicios evangélicos y católicos en Colorado, Ohio, Pensilvania, Texas y otros lugares desde la muerte de Kirk.

“Los pastores deben ver esto como un movimiento auténtico del Espíritu Santo”, dijo J.P. De Gance. “El Espíritu Santo se está moviendo en los corazones y las mentes de hombres y mujeres, haciendo que quieran buscar algo y están regresando”.

De Gance animó a los cristianos a hacer un esfuerzo especial para presentarse a las nuevas caras en la iglesia o a aquellos que han regresado después de un largo lapso. Construir confianza es clave.

“Una vez que alguien sabe que te importa, en ese momento, les va a importar lo que sabes”, dijo.

Aunque Kirk se identificó como un evangélico protestante, sus admiradores incluyeron a destacados clérigos católicos.

“Este tipo es un San Pablo de los tiempos modernos”, dijo el cardenal Timothy Dolan, el arzobispo de Nueva York, en “Fox & Friends”. “Era un misionero, es un evangelista, es un héroe. Es uno que creo que sabe lo que Jesús quiso decir cuando dijo: ‘La verdad os hará libres’”.

El comentario de Dolan fue criticado por algunos católicos de izquierda.

“Cualquier reflexión sobre el legado de Kirk no puede pasar por alto el dolor y el sufrimiento que Kirk infligió a innumerables personas a través de su retórica dura, divisiva y combativa”, escribió John Grosso, editor digital de The National Catholic Reporter.

David Gibson, del Centro de Religión y Cultura de la Universidad de Fordham, una escuela católica en Nueva York, señaló que algunas personas sugieren que la respuesta a la muerte de Kirk podría presagiar un renacimiento religioso en Estados Unidos similar a uno de los anteriores “Grandes Despertares” que han agitado periódicamente el alma nacional.

“Los datos pasados y actuales muestran que el avivamiento no está sucediendo realmente, y si hay algún repunte, es probable que no dure”, agregó Gibson en un correo electrónico.

“Lo que probablemente hará la respuesta al asesinato y al funeral de Kirk es continuar cambiando la naturaleza del cristianismo estadounidense haciéndolo más conservador políticamente y más amigable con el tipo de jóvenes audaces que Kirk inspiró, y a quienes sus seguidores están tratando cada vez más de movilizar con imágenes marciales y retórica de cruzados”.

El pastor Frederick Brown, quien dirige una congregación mayoritariamente negra en The Faith Center Church en Bluefield, West Virginia, también cuestionó el poder de permanencia de cualquier avivamiento a corto plazo inspirado por Kirk.

“Parecería que esto está causando que los jóvenes conservadores se vuelvan más conservadores”, dijo Brown. “Pero ese no es el camino del mundo hoy. Eso va a morir... Y va a cambiar a un lugar de rebelión entre los adolescentes contra la iglesia evangélica”.