
Se adhiere a los criterios de The Trust Project
Es penoso ver a nuestros gobernantes, entiéndase el partido en el poder, suplicar, mendigar por ayuda federal. Si siempre ha sido un espectáculo deprimente, ahora en el momento más crítico de la salud pública, la cosa toma cariz de infantilismo colonial. Parece cierto lo que dijeron los teóricos políticos sobre los pueblos sometidos. En tales contextos no se toman decisiones propias, no se reta la “sapiencia” del poder decisional. Se subordina, se suprime todo pensamiento que libere, que gestione creatividad propia. La sociedad está a la espera del otro, del que decide. Como no hay poder decisional autogestionado el desbarajuste es la norma. La súplica del colonizado degrada la conciencia y empequeñece el alma.
Te invitamos a descargar cualquiera de estos navegadores para ver nuestras noticias: