Washington— Jeffrey Epstein no mantenía una ‘lista de clientes’, reconoció el Departamento de Justicia el lunes al decir que no se harían públicos más archivos relacionados con la investigación de tráfico sexual del adinerado financiero, a pesar de las promesas de la fiscal general Pam Bondi que habían aumentado las expectativas de los influencers conservadores y los teóricos de la conspiración.

El reconocimiento de que el bien conectado Epstein no tenía una lista de clientes a quienes se traficaban niñas menores de edad representa una retractación pública de una teoría que la administración de Donald Trump había ayudado a promover, con Bondi sugiriendo en una entrevista de Fox News a principios de este año que tal documento estaba ‘sentado en mi escritorio’ en preparación para su publicación.

Incluso cuando publicó un video desde el interior de una cárcel de Nueva York destinado a probar definitivamente que Epstein se suicidó, el departamento también dijo en un memorando que se negaba a publicar otras pruebas que los investigadores habían recopilado. Bondi durante semanas había sugerido que se iba a revelar más material: ‘Es una nueva administración y todo va a salir al público’, dijo en un momento dado, después de que una primera publicación de documentos que había promocionado enfureció a la base del presidente Donald Trump al no ofrecer revelaciones.

Ese episodio, en el que personalidades conservadoras de Internet fueron invitadas a la Casa Blanca en febrero y se les proporcionaron carpetas marcadas como ‘Los archivos de Epstein: Fase 1’ y ‘Desclasificado’ que contenían documentos que en gran medida ya estaban en el dominio público, ha impulsado a los influencers de extrema derecha a criticar y ridiculizar a Bondi.

Después de que la primera publicación fracasara, Bondi dijo que los funcionarios estaban examinando una ‘camionada’ de pruebas previamente retenidas que, según dijo, había sido entregada por el FBI. En una entrevista televisiva en marzo, afirmó que la administración de Joe Biden ‘se sentó en estos documentos, nadie hizo nada con ellos’, y añadió: ‘Lamentablemente, estas personas no creen en la transparencia, pero creo que, por desgracia, muchos de ellos no creen en la honestidad’.

Pero después de una revisión de meses de las pruebas en posesión del gobierno, el Departamento de Justicia determinó que ninguna ‘divulgación adicional sería apropiada o justificada’, dice el memorando. El departamento señaló que gran parte del material fue colocado bajo sello por un tribunal para proteger a las víctimas y que ‘solo una fracción’ de él ‘habría sido transmitida públicamente si Epstein hubiera ido a juicio’.

El memorando de dos páginas llevaba los logotipos del Departamento de Justicia y del FBI, pero no fue firmado por ningún funcionario individual.

‘Una de nuestras más altas prioridades es combatir la explotación infantil y llevar justicia a las víctimas’, dice el memorando. ‘Perpetuar teorías infundadas sobre Epstein no sirve para ninguno de esos fines’.

Los conservadores que han buscado pruebas de un encubrimiento gubernamental de las actividades y la muerte de Epstein expresaron indignación el lunes por la posición del departamento. El influencer de extrema derecha Jack Posobiec publicó: ‘A todos nos dijeron que vendría más. Que las respuestas estaban ahí fuera y serían proporcionadas. Increíble lo terriblemente mal gestionado que ha estado este lío de Epstein. Y no tenía por qué ser así’.

El teórico de la conspiración Alex Jones escribió que ‘a continuación, el DOJ dirá ‘En realidad, Jeffrey Epstein nunca existió’’, calificándolo de ‘asqueroso por encima de todo’. Elon Musk compartió una serie de fotos de un payaso aplicándose maquillaje que parecía burlarse de Bondi por decir que la lista de clientes no existe después de sugerir hace meses que estaba en su escritorio.

Entre las pruebas que el Departamento de Justicia dice que tiene en su posesión se encuentran fotografías y más de 10,000 videos e imágenes que, según los funcionarios, representaban material de abuso sexual infantil u ‘otra pornografía’. Bondi había sugerido anteriormente que parte de la razón de la demora en la publicación de materiales adicionales de Epstein era porque el FBI necesitaba revisar ‘decenas de miles’ de grabaciones que, según dijo, mostraban a Epstein ‘con niños o pornografía infantil’.

Múltiples personas que participaron en los casos penales de Epstein y su exnovia socialité británica Ghislaine Maxwell dijeron a AP que no habían visto ni sabían de un tesoro de grabaciones en la línea de lo que Bondi había mencionado. Las acusaciones y los memorandos de detención tampoco alegan la existencia de grabaciones de video y ni Epstein ni Maxwell fueron acusados de posesión de material de abuso sexual infantil, aunque eso habría sido más fácil de probar para los fiscales que los cargos de tráfico sexual que enfrentaron.

La AP sí encontró una referencia en una presentación en una demanda civil al descubrimiento por parte del patrimonio de Epstein de videos e imágenes que podrían constituir material de abuso sexual infantil, pero los abogados involucrados en ese caso dijeron que una orden de protección les impide descubrir los detalles de esa evidencia.

El Departamento de Justicia no respondió a una lista detallada de preguntas de AP sobre los videos a los que Bondi hacía referencia.

El memorando del lunes no explica cuándo ni dónde fueron localizados, qué representan y si fueron encontrados recientemente mientras los investigadores examinaban su colección de pruebas o si se sabía desde hacía algún tiempo que estaban en posesión del gobierno.

Epstein fue encontrado muerto en su celda en agosto de 2019, semanas después de su arresto por cargos de tráfico sexual, en un suicidio que impidió la posibilidad de un juicio.

La revelación del departamento de que Epstein se quitó la vida no es una revelación, aunque los teóricos de la conspiración han seguido desafiando esa conclusión.

En 2019, por ejemplo, el entonces fiscal general William Barr dijo a la AP en una entrevista que había revisado personalmente las imágenes de seguridad que revelaban que nadie entró en el área donde Epstein estaba alojado la noche en que murió y Barr había concluido que el suicidio de Epstein fue el resultado de ‘una tormenta perfecta de errores’.

Más recientemente, el director del FBI, Kash Patel, y el subdirector Dan Bongino han insistido en entrevistas de televisión y podcasts en que las pruebas eran claras de que Epstein se había suicidado.