Vega Alta - Pese a que médicos y profesionales del derecho abogaron por el veto, la gobernadora Jenniffer González defendió este lunes la nueva ley que reconoce al no nacido como persona natural, y rechazó que reste o menoscabe derechos a las mujeres o las coarte en momentos de decidir si desean abortar.

“No, no creo. La medida la firmé el sábado, que era el último día que yo tenía para considerar la pieza legislativa. Y el proyecto incluye una disposición de que ninguna de las cosas contenidas en la ley menoscaban, y estoy citando, menoscaban el poder de la mujer gestante sobre su derecho a su embarazo o a su, no recuerdo bien la expresión, o a la concepción”, sostuvo la gobernadora a preguntas de la prensa.

Se refirió a la Sección 2 de la nueva Ley 183-2025, que lee: “Los derechos que se reconocen al nasciturus no menoscaban la potestad de la mujer gestante a tomar decisiones sobre su embarazo conforme a la ley“.

Durante el fin de semana, la mandataria estampó su firma sobre el Proyecto del Senado (PS) 504 -ahora Ley 183- de la autoría del presidente del Senado, Thomas Rivera Schatz.

La medida enmendó tres artículos del Código Civil para disponer, entre otras cosas, que “todo ser humano es persona natural, incluyendo al concebido en cualquier etapa de gestación del útero materno”, al que se le reconoce capacidad jurídica, un planteamiento que, según diversas organizaciones, prioriza el bienestar del feto sobre el de la persona embarazada.

La medida fue aprobada pese a que diversas voces habían afirmado que la propuesta representa un “ataque directo” contra las mujeres y personas con capacidad de gestar, además de que pone en riesgo la práctica médica. Entre los que abogaron por que no se aprobara el proyecto, figuraban 300 médicos que publicaron una carta abierta con su posición. Argumentaron, además, que la legislación afectaría “de manera desproporcionada a mujeres racializadas como no blancas, empobrecidas y de comunidades marginalizadas”.

Pese a esos argumentos, la gobernadora insistió en su interpretación de la legislación.

“Reconoce que el primer derecho lo va a tener la mujer, sobre todo su proceso. Así que eso es una salvaguarda que está incluida expresamente en ese articulado”, sostuvo González, quien destacó que la medida fue avalada “por la Asamblea Legislativa, con amplio respaldo de otros partidos, no solamente de (la) mayoría” del Partido Nuevo Progresista (PNP).

Mientras, durante una rueda de prensa separada, el secretario del Departamento de Salud, Víctor Ramos, defendió el proceder de la primera ejecutiva, y mencionó que, previo a la firma de la legislación, él se reunió con un grupo de médicos obstetras -con quienes dijo sostuvo una conversación amplia sobre el tema- y reconoció que “la mayoría” estaba “preocupada con el proyecto”.

“Y, probablemente, van a seguir estando en contra del proyecto. Yo no digo que los convencimos, o no, de que el proyecto era bueno o no, porque no es mi función convencerlos. La decisión de política pública la toman los legisladores y la gobernadora. Las agencias del Ejecutivo implantamos las leyes de política pública”, expuso Ramos.

A juicio del titular de Salud, el estatuto no interfiere o afecta procedimientos in vitro, ni la capacidad de las mujeres de decidir sobre el futuro de su embarazo. “Este proyecto lo único que hace es coger estos tres artículos del Código Civil y los une en un solo artículo para que no se interpreten por separado. Todo lo demás que se ha dicho por ahí, no lo dice el proyecto”, argumentó.

Aseguró que la propuesta tampoco representa un problema en el manejo de los embarazos ectópicos, que ocurren cuando un óvulo fecundado se implanta fuera del útero. “La gente puede operar a alguien que tenga un embarazo ectópico y no va a tener ningún problema en estos momentos”, dijo el pediatra.

El PS 504 fue aprobado, en el Senado, con 18 votos a favor, seis en contra y dos abstenidos, con dos ausentes, según la página de la Oficina de Servicios Legislativos. Fuera de la mayoría novoprogresista,en el Senado lo avaló la senadora independiente, Joanne Rodríguez Veve, que es coautora de la pieza.

Mientras que, en la Cámara de Representantes, fue ratificada con 40 votos a favor, 12 en contra y uno abstenido.