El Negociado Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) presentó cargos contra un hombre imputado por dos carkjackings a choferes de Uber.

La denuncia radicada por el FBI identifica León Castillo Rosario como el imputado por dos hechos que se remontan a febrero pasado.

En uno de los incidentes, según la agencia federal, Castillo fue recogido en Trujillo Alto por un chofer de Uber que conducía un auto Kia Soul de 2018.

Cuando salían hacia Barceloneta, Castillo, quien estaba en el asiento del pasajero trasero, “sacó una pistola y apuntó a la cabeza de la Víctima 1″, a quien le instruyó estacionarse y bajarse sin llevarse su teléfono, antes de marcharse en el vehículo.

Mientras, el FBI alega que otro día de febrero un chofer de Uber conduciendo un Infinity QX50 recogió a dos personas en Carolina.

“Mientras conducía por la carretera (PR)851, uno de los individuos le pidió a la Víctima 2 que se detuviera porque se sentía con náuseas. La Víctima 2 detuvo el vehículo y uno de los sujetos le apuntó con un arma en la cabeza y le instruyó que se saliera del carro”, narró la denuncia.

Después de bajarse, los dos individuos se marcharon del lugar.

Posteriormente, el pasado 10 de abril la Policía llevó a cabo una ronda de confrontación, en la que la Víctima 1 identificó a Castillo.

Ese mismo día, según la denuncia, el FBI entrevistó a Castillo, quien accedió a contestar las preguntas.

“Casquillo admitió que participó en el carjacking del Kia Soul” y en “el carjacking del Infinity QX50″, destacó el FBI.

También accedió a que verificaran su teléfono, donde los agentes encontraron conversaciones en aplicaciones de mensajería hablando sobre armas de fuego.

Asimismo, hallaron fotos de Castillo con armas de fuego y vídeos en las que se le ve disparando “en lo que parece ser el lado de una carretera”.

“Además había fotos de los vehículos que comparan con las descripciones de los que robaron mediante carjacking, así como conversaciones y artículos de prensa sobre los carjackings”, afirmó la denuncia.