La Policía identificó el narcotráfico como el móvil del tiroteo que este martes resultó en el asesinato de una bebé de cuatro meses, mientras que dos hombres fueron heridos de bala, indicó el coronel Carlos Cruz, superintendente auxiliar de Operaciones Especiales (SAOE).

“Tiene que ver con narcotráfico. Se ocupó marihuana en el vehículo. Era bastante. No era algo de solo para consumo”, sostuvo Cruz. “Para uno de los heridos, este es el cuarto atentado contra él”.

Señaló que, según la pesquisa preliminar, ese hombre, de 26 años de edad, fue uno de los heridos en el tiroteo que resultó en un doble asesinato registrado el 5 de mayo del año en curso frente a una discoteca localizada en la calle Luis Muñoz Rivera en Cayey, donde también fueron heridas, al menos, dos personas adicionales. El Nuevo Día obtuvo el nombre del individuo pero, de momento, no lo publicará.

En comunicado de prensa, la Policía identificó a la bebé como Anneliez Z. Bonilla Burgos, quien fue transportada a un hospital del área, donde falleció posteriormente a causa de las heridas. También resultó herido de bala el padre de la niña, de 19 años de edad. La madre de la menor, también de 19 años, presentaba laceraciones.

“Uno no quiere pasar juicio ni juzgar, pero es una cuestión de prudencia. ¿Cómo van a montar a ese hombre en el carro con la bebé, sabiendo que lo están buscando para matarlo? Sé que la tragedia es fuerte, pero estamos hablando de que ya lo habían tratado de matar tres veces”, dijo Cruz.

“Nosotros sabemos quién es el bando contrario y sabemos quién pudo haber hecho esto”, agregó el coronel, quien contestó que “sí” cuando se le preguntó si tienen “alguna idea” de quiénes fueron los que dispararon.

Según inteligencia desarrollada por investigadores de la Policía, este tiroteo se suma a otros relacionados a la guerra por el control de puntos de drogas entre la gangas de Nelson Torres Delgado, conocido como “El Burro” y la denominada como “Los Viraos”.

Cuando se le preguntó si recibían cooperación de ciudadanos para la pesquisa, admitió que “todavía existe la ley del silencio, pero esperamos que eso cambie” por el hecho de que la víctima es una bebé.