Las autoridades federales asumieron la custodia de un hombre imputado de narcotráfico y asesinato tras un intento de fuga, con una sierra eléctrica, en el Complejo Correccional Sargento Pedro Joel Rodríguez Matos en Ponce (Las Cucharas).

Los hechos ocurrieron el 23 de noviembre, a las 5:15 de la tarde, indicó el Departamento de Corrección y Rehabilitación (DCR).

El informe preliminar resaltó que un oficial de custodia dijo a la Policía que, tras una confidencia sobre fuga, llevó a cabo una inspección en el módulo 676.

Tras inspeccionar una celda no especificada, el oficial correccional sostuvo que observó daños físicos en una de las ventanas de seguridad y que ocupó una sierre eléctrica marca DeWalt con dos baterías, ocho hojas de segueta, un celular Motorola, unos audífonos AirPods y un cable USB.

El Departamento de Corrección y Rehabilitación (DCR) identificó a los ocupantes de la celda como Eliezer Rivera Otero, alias “Tiki”, de 25 años, y Luis Osvaldo Rivera Rivera, de 23 años.

“Producto de la intervención se ocuparon objetos no autorizados y se movieron confinados a otras instituciones”, indicó el secretario de Corrección, Francisco Quiñones Rivera, en declaraciones escritas.

El funcionario añadió que esas intervenciones “son parte del plan de trabajo que realizamos en todo el sistema correccional para garantizar la seguridad. Estamos reforzando las intervenciones en todas nuestras instituciones”.

El DCR y el Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) de Ponce determinarán cómo los confinados obtuvieron la sierra eléctrica y los demás objetos ocupados, y cómo dichos objetos fueron introducidos al complejo correccional.

“El caso está siendo investigado por el CIC de Ponce para consultar con (la) Fiscalía (de Ponce)”, explicó el capitán de la Policía Edgardo González. “Uno de ellos es tarjeta (objetivo) federal, pero lo que son los daños agravados, eso lo está trabajando el CIC”.

Mientras, el DCR y la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) confirmaron que Rivera Otero ahora se encuentra bajo custodia federal.

Según el Negociado de Prisiones de Estados Unidos, Rivera Otero actualmente se encuentra ingresado en el Centro Metropolitano de Detención (MDC) en Guaynabo.

Rivera Otero fue acusado por un gran jurado en septiembre de este año en un pliego contra 43 presuntos miembros de la organización criminal conocida como “Los Vira’os” que opera en Cayey. Los ocho cargos en su contra incluyen conspiración, distribución de distintas sustancias controladas y fentanilo, así como posesión de armas de fuego.

Pero Rivera Otero se encontraba en Las Cucharas tras ser imputado de varios delitos estatales. En diciembre de 2024 se encontró causa para arresto en su contra y otras dos personas. De acuerdo con la investigación de la Policía, Rivera Otero y otras dos personas llegaron, el 6 de abril de 2024, a la barriada San Cristóbal de Cayey y, supuestamente, asesinaron a Luis Yaniel Huertas Quiñones, de 29 años.

Rivera Otero fue arrestado el 30 de mayo por, presuntamente, poseer un vehículo reportado como hurtado. No obstante, el hombre quedó en libertad tras prestar la fianza de $40,000. Rivera Otero fue detenido, por segunda ocasión, el 3 de junio durante un allanamiento en el residencial Luis Muñoz Morales, y al día siguiente, se encontró causa para arresto por, supuestamente, poseer cocaína lista para distribución y dinero en efectivo.

Previamente, en septiembre de 2024, el Tribunal de Caguas encontró causa para arresto contra Rivera Otero y Kris Yandell Vega González, alias “El Cantante”, por un doble asesinato frente a una discoteca en Cayey.

Por su parte, Rivera Rivera fue ingresado a Las Cucharas tras su arresto en agosto de este año por cargos relacionados con un triple asesinato registrado en Las Marías.

Según la Uniformada, Rivera Rivera, en común y mutuo acuerdo con otros individuos, presuntamente, participó en el secuestro de tres adultos en el residencial El Carmen en Mayagüez.

La investigación policíaca reveló que los perjudicados fueron transportadas hasta Las Marías, y que, al llegar al kilómetro 4.3, los imputados, presuntamente, “los hacen correr hacia el monte y comienzan a dispararles”. Las tres personas fallecieron en la escena.