Universitarios entre ruinas en la UPR de Río Piedras

El banquete con fondos públicos, la deuda sin auditar y el hurto constante se lleva cabo sobre los cuerpos de los niños y los jóvenes puertorriqueños, escribe Catherine Marsh Kennerley

23 de noviembre de 2022 - 10:11 AM

Las opiniones expresadas en este artículo son únicamente del autor y no reflejan las opiniones y creencias de El Nuevo Día o sus afiliados.

Escasos estudiantes pueden observarse en una de las áreas exteriores de Estudios Generales. (Suministrada)

El escritor Cezanne Cardona publicó en días recientes una columna acerca del gasto de $325,200 en el que incurrieron tres exrectores para beber y comer a costa de la UPR, mientras él imparte su clase en un salón en ruinas. El aula, ese espacio donde nos apartamos con nuestros alumnos para que suceda algo extraordinario, como escribió Jane Lazarre, y que recién comenzamos a recuperar después de la pandemia, ya ni siquiera puede garantizarse.

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