Las Piedras - Entre bocinazos, saludos, gritos y hasta abrazos. Así transcurre un día en la vida del presentador de televisión Alex DJ en su pueblo natal.

Alex DJ, animador del programa “Puerto Rico Gana” de Telemundo pudiera ser catalogado como el otro alcalde de Las Piedras, puesto que no importa el rincón que recorra en el municipio, es reconocido con cariño. Alexis R. Colón Rivera, nombre de pila del animador, ha vivido toda su vida en el barrio La Fermina, en Las Piedras, y antes de que su rostro fuera reconocido en la pantalla chica, ya el animador gozaba del aprecio de sus compueblanos. Alex DJ guio a El Nuevo Día por un recorrido por su pueblo y este medio fue testigo del reconocimiento y cariño que le profesa al pedreño.

“Yo nací aquí, me crié y he vivido toda mi vida en este pueblo. La gente me pregunta si me voy a mudar. Aquí todos nos conocemos. En Las Piedras hay gente buena, este es mi pueblo y vivo cerca de mi hermano, mi mamá y de toda la familia. Aquí me quedo”, aseguró el presentador luego de ser saludado por una residente desde el auto.

Alex DJ pasó toda su infancia, niñez y juventud en la casa de sus padres en La Fermina. A los 22 años se despidió del hogar de sus padres y el de su hermano julio para irse literal al patio del lado de la residencia donde construyó su primera casa y en la que todavía vive con su familia. Así que la separación de Alex DJ y su familia fue solo de estructura, porque la casa de su madre, Millie Rivera, sigue siendo su hogar. Tanto así que en nuestra visita irrumpió sorpresivamente la residencia sin avisarle a su progenitora.

“Mami, estoy en casa, voy a entrar”, fue el aviso que le hizo por teléfono Alex DJ a su amada madre. Unos 20 minutos después, Millie llegó al hogar y fue su hijo quien la recibió en la sala del hogar. El padre del presentador falleció.

“Aquí éramos mamá, papá y mi hermano julio y mi hermana de parte de padre Karen, que no vivía con nosotros, pero estaba también aquí. Cuando entro a la casa lo que siento es paz, tranquilidad. Todavía tengo a mi mamá viva y es una bendición. Mi papá ya no está vivo. Estar con mi mamá, es estar con mi psicóloga, mi amiga, mi maestra, mi doctora, la policía. Ella es una gran persona que me enseñó a estar siempre por el camino del bien y ser una buena persona. Sé que no soy como ella, pero aspiro serlo”, comentó Alex DJ con un carrito de juguete en mano que era suyo en su niñez y es parte de los recuerdos que su madre tienen en su hogar.

“Son los grandes tesoros míos”, soltó Millie en relación con las posesiones que guarda con recelo de sus hijos cuando eran pequeños.

Entre esos recuerdos figura una fotografía de Alex DJ en la adolescencia. En el interior del portarretrato se guarda el primer dólar que Alex se ganó como DJ a sus 16 años.

“Este dólar fue de cuando cobré por primera vez mi trabajo como DJ. El dólar representaba lo que ya quería hacer. Hoy mi hijo Julián colocó su primer dólar trabajando en una animación. ¡Qué orgullo siento al ver esto! Tenía 16 años”, explicó con emoción.

Antes de llegar a la televisión en Las Piedras, Alex comenzó a poner música y tirar los “parties” de la escuela superior Ramón Power. En esa escuela estudió los grados décimo, undécimo y duodécimo. Aseguró ser un estudiante “promedio bajito” y ser un “presentado a la hora de las actividades y la animación”. Por sus participaciones en las fiestas lo apodaron Alex DJ.

“En esta escuela estudié. Era presenta’o, montaba actividades y los ‘parties’. Fueron años bien lindos. Aquí me enamoré, gozamos, disfrutamos, estudiamos y la pasamos súper bien. Yo no cambiaría nada de los años escolares que pasé en esta escuela”, afirmó el animador frente al plantel escolar, donde fue reconocido por algunos estudiantes y empleados.

De la escuela superior, el pedreño nos llevó Club Cívico de Las Piedras, ya que sus primeros trabajos con DJ los hizo en ese centro. Fue allí que armó su negocio de música, el que todavía mantiene con siete DJs que pueden amenizar cualquier actividad.

En sus inicios Alex cobraba $80 por actividad y eso incluía, la música, el sonido y hasta luces.

“Uno siempre tenía muchas ganas por hacer música y eso me encantaba, Estuve desde los 16 hasta los 35 y sigo con la compañía de DJs, pero no hago los ‘parties;. Puedo hacer alguna animación, pero la música la tiran los DJs. Toda mi vida he vivido de la música. Desde los 16 mi sueño era ser animador y mi manera fue como DJ porque mi fui puliendo en el micrófono. Después vino la época de karaoke y era yo quien hacía la animación. Me empezaron a llamar para animar las Fiestas Patronales, el Festival de la Juventud y me desempeñaba como maestro de ceremonia. Lo mismo era maestro de ceremonia en un quinceañero cristiano como en una discoteca. Todo me fue preparando para llegar a la televisión. Si no hubiese tenido esta calle no hubiese durado ni un mes en la televisión”, contó, quien pudo realizar hasta ocho eventos en una noche con diferentes empleados.

En esa época, Alex no solo se dedicaba a tirar los “parties”, sino que también los organizaba y cobraba la puerta. Es decir, la recaudación de la entrada era para él. Así fue que dio el pronto para su primera residencia gracias a un evento que coordinó con el productor Raphy Pina en que se presentó el dúo Master Joe & O.G. Black.

“Hicimos un party aquí en el Club Cívico y esto se empaquetó de gente porque el dúo Master Joe & O.G. Black estaban bien pegados y vinieron. Gracias a Master Joe & O.G. Black, que me los trajo Pina yo logré de ganancia $4,000 que fueron mi primer pronto para mi casa que fue de las prefabricadas. Recuerdo tomar el dinero y llevarlo para el pronto de mi casa”, contó Alex, quien también hizo eventos con Tego Calderón, Héctor y Tito y Don Omar en el Club Cívicos.

“Lo más que cobraron fueron Héctor y Tito que fueron $2,000 por presentación”, añadió.

Luego de la energía de los eventos de reguetón, donde Alex encontraba paz y tranquilidad, era en el hogar de sus padres en La Fermina. De su niñez revive con nostalgia de jugar y correr bicicletas con su hermano hasta el anochecer. No había un reloj que avisaba, sino que al salir la luna era tiempo de regresar a la casa. Era y se describe como un niño y adolescente feliz.

“Mi comida era arroz blanco con habichuelas, chuletas o pollo con un vaso grande de leche todos los días. Estar aquí con mi mamá es comprobar lo especial que es para nosotros porque estuvo ahí siempre. Nos ayudó, nos apoyó. Siempre nos ha dado buenos consejos y nos ha hecho gente de bien toda la vida. Cuando hablo con mi hijo Julián me veo reflejado en papi que fue locutor en Walo Radio en Humacao toda su vida. Él era el animador de las patronales, el animador de la inauguración de las tiendas. En mi caso, pues creo tener cosas buenas de los dos, la parte laboral fue ejemplo de mi padre y la sensibilidad es de mi mamá”, puntualizó el padre de tres, dos mujeres y un varón.

El animador está construyendo una nueva residencia, que aunque le provoca mucha ilusión estrenar el hogar, admitió que su espacio y su casa “siempre será, aquí en La Fermina, porque de aquí vengo yo”.

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