


Hoy escribo sobre un tema distinto al de siempre —el relacionado con casos penales, jueces, fiscales y abogados—, aunque muy relacionado con el servicio público y la educación en Puerto Rico. Escribo sobre una experiencia que me hizo transportar a mis años escolares y que vale la pena contar. Hace pocas semanas recibí la invitación de dos maestras de la Escuela Especializada en Matemáticas, Ciencias y Tecnología del Sistema Educativo Municipal Integrado de San Juan para que les hablara a dos de sus grupos sobre mi literatura. (Para quien no lo sepa, después de mi jubilación de la judicatura me he dedicado a escribir literatura de ficción, de no-ficción, crónicas y también columnas para este diario. Ya acumulo quince libros). Por mi desvinculación del tema educativo por los últimos años, yo no tenía idea de que esta escuela municipal existía, y menos de su calidad.

Te invitamos a descargar cualquiera de estos navegadores para ver nuestras noticias: